Reflejos dobles: el sentido profundo del Día del Gemelo en Argentina
Edición Impresa | 21 de Diciembre de 2025 | 04:12
Cada 21 de diciembre, en Argentina se celebra el Día del Gemelo, una efeméride que va más allá de lo simbólico: es una oportunidad para visibilizar un fenómeno biológico fascinante, para homenajear a quienes comparten una conexión muy particular y para reflexionar sobre los desafíos y mitos que lo rodean. La elección de la fecha no es casual: “21/12” tiene una simetría numérica que evoca la idea de duplicidad y espejo, una forma poética de representar lo que significa ser gemelo.
Aunque no hay registro de una autoridad global que “instituyó” oficialmente ese día, los medios argentinos lo han adoptado para recordar a las personas nacidas de un mismo embrión que se dividió, lo que popularmente llamamos “gemelos idénticos”.
Para entender por qué existe tanta fascinación (y confusión) con los gemelos, es clave diferenciar entre varios tipos:
Gemelos idénticos (monocigóticos)
• Se originan cuando un solo óvulo es fecundado por un espermatozoide y luego, muy temprano en el desarrollo, ese cigoto se divide en dos embriones.
• Comparten una parte muy grande de su ADN, lo que les da similitudes físicas muy marcadas, aunque no son clones perfectos: hay variaciones en su genética.
• Suelen tener el mismo sexo, porque provienen del mismo material genético.
• Dentro de este grupo pueden existir variaciones muy interesantes, como los gemelos espejo: en aproximadamente el 25% de los casos monocigóticos, la división ocurre en un momento en que el embrión ya ha definido “su lado derecho e izquierdo”. Eso puede producir que un gemelo sea diestro y el otro zurdo, o que las marcas de nacimiento sean espejadas.
• Además, se han documentado gemelos siameses (o unidos) en raras ocasiones, cuando la separación del embrión no se completa del todo.
Mellizos (dicigóticos o fraternales)
• En este caso no hay división de un cigoto, sino dos óvulos diferentes fecundados por dos espermatozoides distintos.
• Genéticamente, son tan parecidos (o tan distintos) como cualquier par de hermanos, dado que comparten cerca del 50 % del ADN.
• Pueden ser de distinto sexo: uno varón y otra mujer, por ejemplo.
• La transmisión de la “tendencia” a tener mellizos puede tener un componente hereditario: algunas mujeres tienen más probabilidades de ovular de manera múltiple, cosa que no ocurre en la misma medida con los gemelos idénticos.
Cuántos gemelos/mellizos hay: datos globales y locales
A nivel mundial:
• Según un estudio demográfico reciente, 1,6 millones de parejas de gemelos nacen cada año en el mundo.
• La tasa de gemelos (“twinning rate”) ha aumentado: pasó de ~9 gemelos por cada 1.000 nacimientos en los años 80 a ~12 por cada 1.000 en el periodo 2010-2015.
• Eso significa que 1 de cada 42 bebés que nacen hoy es un gemelo, según los investigadores.
• Las razones principales para este crecimiento son el uso creciente de técnicas de reproducción asistida (como la fertilización in vitro, los tratamientos de estimulación ovárica) y el hecho de que muchas mujeres están postergando la maternidad.
• Sin embargo, algunos expertos creen que ya se podría haber alcanzado un “pico gemelar”: en ciertos países, las políticas médicas han cambiado para priorizar embarazos de un solo bebé debido a los riesgos que implican los partos múltiples.
• En cuanto a los tipos de gemelos, el estudio del Icmbo (Centro Internacional para el Estudio de Nacimientos Múltiples) indica que los gemelos monocigóticos (idénticos) se mantienen relativamente constantes: ~ 4 nacimientos de gemelos idénticos por cada 1.000 nacimientos.
En el plano nacional:
• No hay un dato público reciente confiable que declare exactamente cuántos gemelos “vivos” hay hoy en Argentina (es decir, cuántas parejas de gemelos existen), pero sí hay algunas pistas:
• Se estima que alrededor del 2 % de los embarazos son gemelares.
• En artículos sobre mitos y realidades de los gemelos, se afirma que “en la Argentina nacen 10.000 gemelos por año” aproximadamente.
• Desde el punto de vista obstétrico, la Guía Clínica Argentina (o manuales médicos locales) indica que los embarazos gemelares representan una parte no despreciable de las complicaciones perinatales, con una frecuencia que puede variar según el tipo de gestación.
Riesgos, mitos y realidades médicas
Tener un embarazo gemelar no es lo mismo que uno singular. Hay varias implicancias médicas que conviene conocer:
• Los embarazos múltiples (gemelares) conllevan mayores riesgos: por ejemplo, hay una alta proporción de partos prematuros entre gemelos.
• En algunas configuraciones gemelares, como los gemelos monocoriales, pueden presentarse complicaciones serias (por ejemplo, síndrome de transfusión feto-fetal) que requieren monitoreo obstétrico especializado.
• El mito de que “los gemelos idénticos tienen exactamente el mismo ADN” no es totalmente cierto: aunque comparten gran parte del genoma, pueden existir diferencias en ciertas regiones o en cómo se expresan algunos genes.
• Otro mito popular es que los gemelos tienen huellas dactilares idénticas: falso. Aunque los gemelos puedan parecer muy similares, sus huellas son diferentes porque durante el desarrollo intrauterino cada feto tiene movimientos distintos que influyen en la formación de las líneas de las huellas.
• Además, muchos gemelos desarrollan un lenguaje privado durante la infancia (lo que se conoce como criptofasia). Según algunas investigaciones, hasta el 45 % de los gemelos lo experimenta.
Cómo distinguir gemelos (idénticos) vs mellizos o entre sí
Desde lo clínico y lo cotidiano, hay varias formas (y pistas) para diferenciar gemelos idénticos, mellizos o para reconocer que dos personas gemelas no son tan “iguales” como podría parecer a simple vista:
• Ecografía prenatal
Durante el embarazo, los médicos pueden observar si los fetos comparten placenta (“monocorial”) o cada uno tiene la suya (“bicorial”). Esa información da pistas sobre su tipo de gemelos.
También se puede ver cómo están las membranas que los separan, lo que ayuda a anticipar riesgos y planear el seguimiento.
• Genética
Un test de ADN es la forma más concluyente para determinar si son gemelos idénticos (monocigóticos) o no.
Después del nacimiento, también se puede hacer este análisis si hay dudas o interés científico/familiar.
• Rasgos físicos
Aunque los gemelos idénticos suelen parecer muy similares, pueden tener diferencias dramáticas: marcas de nacimiento distintas, asimetrías faciales, preferencia de mano distinta (especialmente en gemelos espejo).
También pueden diferenciarse por su desarrollo (peso al nacer, altura, etc.).
• Comportamiento y lenguaje
Como se mencionó, algunos gemelos crean su propio “idioma” en la infancia, lo que puede ser una señal de su relación muy íntima.
La forma en que interactúan, cómo se mueven, cómo se apoyan mutuamente también puede dar pistas de un vínculo especial.
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