No llegaron al “casamiento”: se acabó el “amor” entre Elisa Carrió y el misterioso hombre de 95 años

Lilita confesó que tenía un novio famoso, nonagenario, con citas clandestinas y besos en la vereda. Pero a las pocas horas, reveló que todo era mentira: “Me pareció una historia fantástica”

Elisa “Lilita” Carrió siempre da que hablar. Pero esta vez, lo hizo desde un costado inesperado: el amor. En una entrevista, sorprendió con una revelación explosiva: aseguró que estaba de novia con un hombre de 95 años. Y no cualquier hombre: según dijo, era “muy famoso”, aunque se negó a dar el nombre.

El relato parecía salido de una comedia romántica: encuentros en la esquina, besos furtivos, nada de WhatsApp ni Tinder, y un pacto de discreción para que nadie los descubra en un café. Carrió incluso contó que el secreto de la buena relación era simple: “La relación se reduce a la ternura, nada más”.

La trama del “romance”

La exdiputada pintó una escena digna de telenovela: “Nos encontramos una vez por semana, nos damos un beso y después yo me vuelvo a mi casa, y él a la suya”. Y agregó, con humor: “Él está un poco perdido, pero en mi estado de enfermedad creo que funciona. Nos llevamos muy bien. Yo ya estoy en la tercera edad, voy a cumplir 70, y me lleva 25. Es una buena diferencia”.

Un romance intergeneracional, misterioso y con ribetes de ficción. En las redes, muchos empezaron a preguntarse: ¿quién era el enigmático caballero nonagenario que habría conquistado el corazón de Lilita?

De García Márquez a VideoMatch

Pero el sueño romántico se derrumbó al día siguiente. Carrió misma fue la encargada de dinamitar su propia historia: “Era una broma, una mentira maravillosa. Me pareció fascinante inventar que me encontraba con un famoso de 95 años. Es como ‘El amor en los tiempos del cólera’ de García Márquez”.

Con un guiño televisivo, comparó la escena con las bromas de VideoMatch: “Viste cómo hay falsas narrativas y dicen que vivimos en la posverdad. Yo digo la verdad a la política, pero me pareció divino inventar esto”. Y remató con una frase que dejó a todos con la boca abierta: “Siempre hay que inventar una gran mentira para tapar la verdad”.

El show paralelo

La reacción en las redes no se hizo esperar. Twitter, Instagram y TikTok estallaron con memes, comparaciones y bromas sobre el misterioso novio de 95 años. Algunos lo bautizaron como “el sugar abuelito de Lilita”, otros lo emparentaron con personajes de la política, y hasta hubo quienes lo vincularon con celebridades de otra época.

Los usuarios recordaron también viejas ocurrencias de Carrió: cuando dijo que quería casarse de blanco a los 80 años, o cuando recomendó que las parejas tengan “dos baños separados” porque “el divorcio empieza con cómo se aprieta el dentífrico”.

Su propio culebrón

En la comparación inevitable con la farándula, Carrió quedó ubicada en el rol de protagonista de un culebrón al mejor estilo de Televisa. Un día se mostraba enamorada, con un romance secreto que parecía salido de una novela turca, y al siguiente admitía que todo era ficción.

Como si se tratara de una mezcla de Mirtha Legrand y Susana Giménez, Lilita volvió a demostrar que puede pasar del discurso político más duro a la anécdota sentimental más excéntrica sin escalas.

Política, salud y novela

Más allá de la comedia, Carrió también habló de su presente. Confesó que su salud le impide volver a ser candidata, recordó que sufrió un ACV y una epilepsia focal, y criticó al Gobierno actual por lo que llamó una “violencia verbal insoportable”.

Sin embargo, su confesión sentimental opacó cualquier comentario político. La imagen de Carrió, besándose en una esquina con un galán de 95 años, ya había quedado instalada en la imaginación colectiva.

Aunque la historia se desarmó en menos de 24 horas, dejó un tendal de titulares, chismes y debates en redes. Lilita no llegó al casamiento, pero volvió a demostrar que sabe cómo captar la atención: con humor, con ternura y con la dosis justa de ficción.

Porque en el universo Carrió, la política y la farándula se confunden, y siempre queda la duda: ¿era todo un chiste… o había algo de verdad detrás del “novio secreto”?

 

Carrió

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