El año soñado de Leticia Brédice

Leticia Brédice es de esas mujeres que sobresale del montón, que no es una más, que tiene brillo propio, ángel y glamour innato. Consciente de sus cualidades las explota no sólo como actriz sino también como cantante. Lejos de querer ser una "actriz seria", la artista, cada tanto, sorprende con un estilo tan zafado como exquisitamente personal. Actualmente es una de las protagonistas de "Locas de Amor", el unitario que emite Canal 13, todos los martes a las 23.30, que trata sobre la convivencia de tres ex pacientes de un neuropsiquiátrico. Allí interpreta a Simona, una mujer con personalidad bipolar: "Yo soy Simona, no me avergüenzo de lo que le pasa. Sería su amiga y la acompañaría", contaba en una entrevista.

Su infancia la transitó en el barrio porteño de Villa Urquiza. Es hija de napolitanos y creció en una familia muy tradicional, y entre sus vivencias está la de los vecinos que llegaban a su casa en busca de arte y diversión. Algunos años antes, mientras cursaba el bachillerato del colegio Reconquista de Villa Urquiza, una profesora de contabilidad solía expulsarla de la clase porque se aparecía con máscaras de Chipi e Hijitus, confeccionadas por un tío. Desolada, se iba a llorar a la puerta de la casa de Pil Trafa -cantante de Los Violadores-, que quedaba a pocas cuadras de la escuela, y se ponía a cantar el tema de la banda "Represión". "Era pésima como estudiante. No podía, me aburría. Me quedó como un trauma ahí. Tuve que dejar en cuarto año", contó.

Estudió teatro desde los 13 años con Norman Briski. Escribía historias con amigos y hacía cortos. De esas clases de teatro "volvía revolucionada, con mucha información, dolor y ansiedad", razón por la cual su madre le recomendó que estudiara periodismo, comunicación o locución. Pero la rubia transgresora prefirió seguir dedicándose a su vocación, que años más tarde se convertiría en su profesión: "Soy absolutamente feliz viviendo de mi vocación. No cambiaría ninguno de los momentos de mi vida", revelaba en una entrevista.

En relación la trabajo, Brédice, que actuó en más de veinte películas e hizo innumerables obras de teatro y programas televisivos, prefiere los musicales, como "Cabaret" y las tragedias.

"ME GUSTA ESA CHICA"

Leticia Brédice desnudó sus más íntimos pensamientos en una entrevista con Daniel Tognetti, para Terra Lycos. La actriz se refirió a cierto costado lésbico y no ocultó sus fantasías sexuales. "Me gustan las mujeres, pero nunca me enamoré de una", dijo, para luego agregar que "las mujeres hablamos de los miedos, las vergüenzas; el hombre tiene cosas que por cultura no puede decir, si es tímido o acomplejado, y eso los hace menos interesantes". La actriz de "Cenizas del Paraíso" mostró su costado feminista al expresar que "las mujeres somos mucho más contenedoras y solidarias frente a las demás mujeres".

En cuanto a la relación entre hombres y mujeres, Brédice afirmó que "los hombres con otros hombres se despiertan, pero cuando están con otras mujeres, se adormecen". Y también dijo que "las mujeres no miramos tanto a los hombres como los hombres a las mujeres".

Si recibiera un premio, según declaró en dicha oportunidad "le agradecería a todos mis novios, que me enseñaron lo maravilloso del sexo y la lujuria: gracias a ellos hago grandes escenas de sexo en el cine nacional".

Uno de los momentos más altos de la entrevista ocurrió cuando Brédice confesó que había tenido sueños eróticos con la actriz Reina Reech: "Soñé que era pareja de ella, y que íbamos tomadas de la mano". También dijo que podría tener sexo con mujeres, y, ante el gesto de asombro de Daniel Tognetti, agregó -por las dudas- que "jamás lo haría con animales".

SIEMPRE CANTO

La actriz que fue feliz al ser tapa de la revista Rolling Stone vive en un amplio y paquete loft de Puerto Madero lleno de candelabros, propiedad de Alan Faena, con quien está de nuevo de novia luego de un tiempo de separación. "Canto desde siempre. Desde que era chiquita y me ponía una peluca e imitaba a Rafaella Carrá. O a Adriano Celentano. Hacía travestismo frente al espejo. Jugaba a ser una diva, movía el pelo", recordaba. Leticia Brédice acaba de editar "Actriz", su disco debut. Con una gran producción alrededor, el álbum comienza con una frase recitada de Cecilia Roth que funciona como prólogo. El track se titula "La videncia". "Tenés que tener cuidado Leticia. Si cantás no vas volver a ser actriz porque nadie te va a creer", musita Roth. Se trata de la puerta de entrada para un disco en el que se entreveran hip hop, bossa nova, soul, tango y en el que no falta el clásico de Sumo "La rubia tarada".

Según sus declaraciones a la prensa, al principio le costaba escucharse. "Era una tortura. Un día me bajó la presión, me transpiraban las manos, sentía un hormigueo en todo el cuerpo. No la estaba pasando nada bien. `Para qué me habré metido en esto`, pensaba. Si yo estaba encantada con la actuación. Barajé irme a casa y no volver más, pero ya estábamos a mitad de camino y había un montón de gente laburando. ¿Qué hago? ¿Me voy a la India a vivir en un ashram o me hago la estrella de rock y no atiendo nunca más el teléfono? Me la banqué. Volví despacito a tomar más clases de canto. Me pidieron que no hablara mucho, que cuidara la voz. ¡A mí, que no puedo parar de hablar! ¡Que soy una comunicadora social como Mónica Cahen D'Anvers! Y ahora me gusta mi voz. Me divierte. Tengo el disco que quería tener", indicó.