Jorge y Federico D'Elía: juntos en teatro y TV
| 21 de Febrero de 2004 | 00:00
Si bien ya trabajaron juntos en otras ocasiones, Jorge y Federico D'Elía están llevando a cabo todo un éxito en teatro en la Costa Atlántica y por ello se destaca su labor conjunta entre padre e hijo por estos días. "De guante blanco", la obra que dirige Jorge D'Elía y en la que actúa su hijo junto a Martín Seefeld y Alejandro Fiore, es la sucesora, en lo que a labor en conjunto se refiere, de "El organito", primer rol actoral de Federico. Padre e hijo también habían trabajado juntos en el glorioso paso de "Los Simuladores" por la pantalla de televisión.
"Mi papá me dirigió en mi primer trabajo y en este último, por ello esta obra tiene un significado especial, pero esperamos que se repita", comentó el protagonista de "Los Simuladores" sobre la pieza escrita y dirigida por su papá.
A pesar de que los D'Elía no compartieron mucho tiempo juntos mientras Federico fue niño, dado que la familia se desmembró y en tanto él quedó con su mamá en La Plata su papá se radicó en la capital federal, disfrutan trabajando juntos y se llevan de maravillas.
PADRE E HIJO
"Para mí, trabajar con Federico es un placer, porque tenemos el mismo criterio sobre esta profesión: divertirnos, pasarla lo mejor que se pueda y con un gran compromiso. Además, nos conocemos mucho", acotó papá Jorge, con explícito orgullo. Y comentó que, tal como ocurrió cuando compartieron tareas en la novela protagonizada por Chayanne y en "El precio del poder", actualmente tiene un camarín juntos.
Sucede que, más allá de los desencuentros de antaño, los une una profesión por la que sienten igual pasión. "Mi reencuentro con él fue a los 18 años, cuando me vine a Buenos Aires para hacer teatro y convivimos por un tiempo, pero enseguida me fui a vivir solo. Fue así que pasé a tener una relación de adultos, individual", rememora Federico. Y Jorge muestra su orgullo por la carrera independiente que desarrolló su hijo actor: "Jamás me pidió nada, ni yo a él".
Tan buena es la relación actual entre padre e hijo D'Elía que hasta Martín Seefeld y Alejandro Fiore lo adoptaron como papá a Jorge a raíz de la labor conjunta en "De guante blanco" y amistad de tantos años con Federico. "El proyecto se generó desde un principio de una manera familiar, con gente a la cual conocíamos desde antes, para evitar conflictos externos y trabajar en el verano con comodidad", explicó Federico, además de agregar que encontró dos hermanos "postizos".
"Además de mis dos hermanos, papá tuvo después tres hijos más. Estoy muy acostumbrado a compartirlo", bromeó al respecto.
DE GUANTE BLANCO
Tal fue el clima de intimidad que se generó en la puesta que, con tan sólo 42 ensayos, Jorge D'Elía logró una perfecta sincronización para que "De guante blanco" fuera un entretenimiento dinámico y absolutamente armónico. Claro que tenía la ventaja de la larga amistad que une a los tres protagonistas. Pero, además, sintió que tanto Seefeld como Fiore se colocaron en la misma instancia que Federico.
"Se pusieron como hijos míos, y eso a me ayudó muchísimo en el proceso evolutivo de la obra. Tenían un nivel de acatamiento del cien por ciento. Los reuní cerquita del estreno para preguntarles si alguno sentía que era menos protagónico que el otro, ¡y me sacaron corriendo!", puntualizó Jorge D'Elía.
"Mi papá me dirigió en mi primer trabajo y en este último, por ello esta obra tiene un significado especial, pero esperamos que se repita", comentó el protagonista de "Los Simuladores" sobre la pieza escrita y dirigida por su papá.
A pesar de que los D'Elía no compartieron mucho tiempo juntos mientras Federico fue niño, dado que la familia se desmembró y en tanto él quedó con su mamá en La Plata su papá se radicó en la capital federal, disfrutan trabajando juntos y se llevan de maravillas.
PADRE E HIJO
"Para mí, trabajar con Federico es un placer, porque tenemos el mismo criterio sobre esta profesión: divertirnos, pasarla lo mejor que se pueda y con un gran compromiso. Además, nos conocemos mucho", acotó papá Jorge, con explícito orgullo. Y comentó que, tal como ocurrió cuando compartieron tareas en la novela protagonizada por Chayanne y en "El precio del poder", actualmente tiene un camarín juntos.
Sucede que, más allá de los desencuentros de antaño, los une una profesión por la que sienten igual pasión. "Mi reencuentro con él fue a los 18 años, cuando me vine a Buenos Aires para hacer teatro y convivimos por un tiempo, pero enseguida me fui a vivir solo. Fue así que pasé a tener una relación de adultos, individual", rememora Federico. Y Jorge muestra su orgullo por la carrera independiente que desarrolló su hijo actor: "Jamás me pidió nada, ni yo a él".
Tan buena es la relación actual entre padre e hijo D'Elía que hasta Martín Seefeld y Alejandro Fiore lo adoptaron como papá a Jorge a raíz de la labor conjunta en "De guante blanco" y amistad de tantos años con Federico. "El proyecto se generó desde un principio de una manera familiar, con gente a la cual conocíamos desde antes, para evitar conflictos externos y trabajar en el verano con comodidad", explicó Federico, además de agregar que encontró dos hermanos "postizos".
"Además de mis dos hermanos, papá tuvo después tres hijos más. Estoy muy acostumbrado a compartirlo", bromeó al respecto.
DE GUANTE BLANCO
Tal fue el clima de intimidad que se generó en la puesta que, con tan sólo 42 ensayos, Jorge D'Elía logró una perfecta sincronización para que "De guante blanco" fuera un entretenimiento dinámico y absolutamente armónico. Claro que tenía la ventaja de la larga amistad que une a los tres protagonistas. Pero, además, sintió que tanto Seefeld como Fiore se colocaron en la misma instancia que Federico.
"Se pusieron como hijos míos, y eso a me ayudó muchísimo en el proceso evolutivo de la obra. Tenían un nivel de acatamiento del cien por ciento. Los reuní cerquita del estreno para preguntarles si alguno sentía que era menos protagónico que el otro, ¡y me sacaron corriendo!", puntualizó Jorge D'Elía.
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