Cumplió 125 años la Escuela 17 de Villa Elisa
| 13 de Noviembre de 2010 | 00:00
La Escuela Nº 17 "Luis Castells" de Villa Elisa cumplió 125 años y lo festejó embanderando su frente, con espectáculos artísticos, exposiciones y con una emotiva cena que se realizó ayer en el establecimiento y de la que participaron 200 personas de distintas generaciones que se reunieron para recordar su paso por la escuela.
La señorial galería del establecimiento se convirtió en el fiel testimonio de una historia que con distintos trabajos contaron los chicos, pero que también escribieron sus abuelos. Por eso no fue extraño ver una sucesión de fotos color sepia que retrataron niños de otros tiempos prolijamente pegadas en los murales. Según los relatos, ellos también se reunían a jugar bajo el ceibo que aún preside el patio y sigue siendo símbolo escolar y testigo de travesuras infantiles.
"Todos los grados trabajaron en torno a temas variados como la historia argentina, la del barrio, la interculturalidad, la recolección de fotografías o monedas y billetes antiguos que se exponen en la galería", señaló Alejandra Antognini, vicedirectora del establecimiento.
La exposición "Mi escuela y el barrio", una correcaminata y el banderazo fueron sólo algunos de los momentos más emotivos que se vivieron en el colegio que el 10 de noviembre último cumplió 125 años. "Los más pequeños no paraban de cantar y saltar, están todos muy contentos porque esta es una institución muy querida y que tiene una rica historia", indicó la docente. Además, se remarcó que ex alumnos como Fortunato Vilca o Ema Amado, una vecina de 80 años, participaron de los festejos y relataron con un cariño entrañable cómo fue su paso por la institución.
PRIMERA ESCUELA DE LA ZONA
Según está documentado, el colegio fue la primera institución de Villa Elisa que comenzó a funcionar el 17 de febrero de 1885 en una propiedad de calle 1 y 59, pero en 1890 fue transferida a 12 entre 50 y 51 de Villa Elisa, una propiedad donada por Luis Castells al Consejo Escolar.
Para concretar la donación, se puso como requisito que la escuela fuera mantenida por el Consejo Escolar, que el edificio se utilizara siempre para esa finalidad pedagógica y que se la vinculara con el nombre de su benefactor, llamándola Escuela Castells.
Al colegio asisten en la actualidad unos 300 alumnos que se reparten entre los turnos de la mañana y de la tarde y se informó que permanece abierta durante el verano.
La señorial galería del establecimiento se convirtió en el fiel testimonio de una historia que con distintos trabajos contaron los chicos, pero que también escribieron sus abuelos. Por eso no fue extraño ver una sucesión de fotos color sepia que retrataron niños de otros tiempos prolijamente pegadas en los murales. Según los relatos, ellos también se reunían a jugar bajo el ceibo que aún preside el patio y sigue siendo símbolo escolar y testigo de travesuras infantiles.
"Todos los grados trabajaron en torno a temas variados como la historia argentina, la del barrio, la interculturalidad, la recolección de fotografías o monedas y billetes antiguos que se exponen en la galería", señaló Alejandra Antognini, vicedirectora del establecimiento.
La exposición "Mi escuela y el barrio", una correcaminata y el banderazo fueron sólo algunos de los momentos más emotivos que se vivieron en el colegio que el 10 de noviembre último cumplió 125 años. "Los más pequeños no paraban de cantar y saltar, están todos muy contentos porque esta es una institución muy querida y que tiene una rica historia", indicó la docente. Además, se remarcó que ex alumnos como Fortunato Vilca o Ema Amado, una vecina de 80 años, participaron de los festejos y relataron con un cariño entrañable cómo fue su paso por la institución.
PRIMERA ESCUELA DE LA ZONA
Según está documentado, el colegio fue la primera institución de Villa Elisa que comenzó a funcionar el 17 de febrero de 1885 en una propiedad de calle 1 y 59, pero en 1890 fue transferida a 12 entre 50 y 51 de Villa Elisa, una propiedad donada por Luis Castells al Consejo Escolar.
Para concretar la donación, se puso como requisito que la escuela fuera mantenida por el Consejo Escolar, que el edificio se utilizara siempre para esa finalidad pedagógica y que se la vinculara con el nombre de su benefactor, llamándola Escuela Castells.
Al colegio asisten en la actualidad unos 300 alumnos que se reparten entre los turnos de la mañana y de la tarde y se informó que permanece abierta durante el verano.
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