El sector externo genera inquietud

Edición Impresa

Los recientes números balance cambiario de septiembre no muestran cambios de tendencia. El resultado de la cuenta corriente cambiaria de septiembre fue de 1.595 millones negativos producto del pago de intereses (por 492 millones), del giro de utilidades y dividendos (124 millones) y de la balanza comercial deficitaria (por un total de 1.084 millones a agosto pasado).

Por el lado de la cuenta de capital, en septiembre, la formación de activos externos totalizó una baja de 2.214 millones luego de la caída de 3.165 millones de agosto pasado que representaron la cifra más elevada desde octubre de 2011). Además hubo poca Inversión Externa Directa, (IED) (ya que sólo llegaron 72 millones de dólares y se tomó deuda por (2.235 millones de dólares adicionales)

Como resultado de las cuentas del balance cambiario, las reservas se incrementaron 1.360 millones de dólares en septiembre 2017, cerrando el mes con un stock de 50.237 millones, cifra que volvió a crecer en octubre.

Lo cierto es que según los datos acumulados desde enero 2016 y en números “redondos”, se observa que más del 90% de los dólares que ingresan por cuenta capital y financiera son deuda, y menos del 10% es IED.

De esos dólares que entran por cuenta de capital y financiera, una mitad financia déficit de cuenta corriente y la otra mitad la formación de activos externos del sector privado.

En este escenario, el problema de las cuentas externas es la insuficiente IED, que se ubica entre 3 y 3,5 puntos porcentuales en términos del producto por debajo del promedio regional. Actualmente, Argentina tiene IED equivalente por 0,5% del PBI, mientras que Chile (7%); Colombia (5%) y Perú (4,5%) tienen niveles superiores. De hecho, Argentina debería tener IED 9 veces superior a la que registra, lo cual agregaría 3,5/3,0 puntos porcentuales al ratio imnversión/PBI, según Economía & Regiones,

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE