Una auténtica fiesta de Copa

El gran ausente fue Carlos Bilardo, poco afecto a los homenajes. Treinta mil personas dijeron presente

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Estudiantes volvió a jugar un partido de Copa Libertadores y su gente reventó las tribunas del Estadio Unico: alrededor de 30 mil personas dijeron presente. Claro, además del regreso del Pincha a la competencia que más le gusta a sus hinchas, su ídolo moderno, Juan Sebastián Verón, ofreció una nueva función a casi tres años de haber retirado.

Por eso, la noche fue más copera que nunca. Desde temprano se respiró un clima especial en las calles y más tarde en la tribuna. Los recuerdos del equipo de Osvaldo Zubeldía, el recuerdo de la batalla de Gremio, las hazañas de 2006 y la gesta en el Mineirao con Alejandro Sabella se dieron la mano en la húmeda noche platense.

La previa fue calentando motores con varios videos de la Brujita Verón, en acción y con la famosa arenga minutos antes de jugar el partido contra Barcelona en Abu Dhabi.

Cada imagen suya despertó el aplauso de los presentes, que se convirtió en ovación cuando el plantel saltó al campo de juego, con el presidente-capitán como uno de los primeros de la fila. “Olé, olé, Bruja, Bruja...”, el grito de guerra.

A la hora del anuncio de la formación albirroja, su nombre se pronunció en el final. Los de la tribuna gritaron “Esa es la famosa Bruja que volvió a Estudiantes para ser campeón...”. Los de la platea se pusieron de pie para aplaudirlo.

La cancha lució como en las mejores noches. Cerca de 30 mil hinchas colmaron las tres tribunas que estuvieron habilitadas. Fue muy difícil el ingreso, porque la inmensa mayoría quiso hacerlo minutos antes del inicio del partido. Entonces para las 20:45 había cuatro cuadras de cola.

Algunos hinchas se quejaron luego de que se les había pedido el DNI, algo que provocó enojo, molestias y, principalmente, mucha demora para el resto de los hinchas que querían meterse en el estadio.

Otro de los que no se quiso perder la fiesta fue José Luis Brown, quien llegó bien temprano en compañía de su esposa e hijo menor. Saludó a todos los presentes, dio notas a los medios radiales y luego ocupó un lugar en la platea oficial. En una charla con este medio dijo que sólo una cosa le quedó pendiente: salir campeón con Estudiantes de la Libertadores.

Como era de esperar llegaron hinchas de casi todas las filiales del país. José Luis Herrero de San Miguel del Monte, el Vasco Iturria de Azul y varios integrantes de la filial Marcos Rojo de Olavarría, José Luis Brown de Ranchos, Israel Damonte de Chascomús, Santiago Ascacibar de Florencio Varela, Juan Echecopar de Pergamino, de Mar del Plata, Verónica, Magdalena, Bahía Blanca y de Entre Ríos, entre otros tantos.

De La Plata y alrededores llegaron la mayoría. Las banderas alrededor de la cancha: “Parque Saavedra”, “Abasto”, “Altos de San Lorenzo”, “Olmos”, “4 de agosto”, “El 7-0 no se olvida nunca más”, “Lanús te ama”, Plaza Alberti”, “Mondongo”, “City Bell”, “Berazategui”, “Tolosa Enajenada”, “23 y 68”, “Berisso”, “Cantilo y 29”, “Ringuelet”, “16 de octubre”, “La Libertadores”, “Los leales”, “Plaza Güemes”, “Para Bilardo la Selección” y “Bilardo es Estudiantes”.

Bilardo no vino, pero si otros campeones

En sintonía con el regreso de Verón al fútbol, el otro gran protagonista que esperaba la noche era Carlos Salvador Bilardo, ex jugador y técnico campeón con Estudiantes.

En las horas previas había dado el okey para estar presente, a pesar de que se sabe que no le gustan mucho los homenajes. Eso había generado una expectativa importante, que se desvaneció cuando minutos antes del partido se anunció que no iba a venir.

En cambio sí lo hicieron otros jugadores campeones con el Pincha, como el Flaco Poletti, Cacho Malbernat, Bocha Flores y Juan Ramón Verón, que recibieron una distinción de parte del Club en el entretiempo del partido.

Buen respaldo para el visitante

En la cabecera Norte se ubicaron los hinchas de Barcelona de Guayaquil, que llegaron muy temprano acompañados por efectivos policiales. Lo hicieron casi en sintonía con el arribo del plantel profesional, es decir a las 19 horas.

Los hinchas, unos 500, se instalaron con sus banderas en la tribuna. Algunos de ellos eran ecuatorianos radicados en nuestro país.

Los dirigentes, encabezados por su presidente José Cevallos y el vice de fútbol, el argentino Carlos Alfaro Moreno. Junto a ellos unos seis directivos más, que esperaron unos minutos hasta que fueron trasladados a uno de los palcos en el anillo superior.

En el listado de jugadores invitados por la dirigencia de Barcelona se encontraban casi todos los argentinos que alguna vez vistieron dicha camiseta. Entre ellos varios conocidos, como Rubén Capria, José Chatruc, Tony Gómez, Gastón Sessa y Rubén Darío Insúa.

Rapate por la Bruja, arriesgado desafío

En la zona de estacionamientos el Club Estudiantes puso en funcionamiento un stand dedicado exclusivamente al regreso al fútbol de Juan Sebastián Verón.

Fotos, videos y un sorteo de una camiseta muy particular: para poder participar había que dejarse rapar la cabeza. Fueron varias docenas de hinchas los que accedieron a semejante desafío. Uno de ellos, al final del partido, se llevó la camiseta de la Brujita Verón.

 

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