Cyterszpiler-Maradona, una amistad que había terminado por negocios

El suicidio de Jorge Cyterszpiler, ocurrido hoy a los 58 años, dos más que Diego Armando Maradona, conmovió al mundo del fútbol, porque sus nombres están intrínsecamente ligados en el tiempo, ya que fueron amigos desde la niñez y vivieron la adolescencia cuando uno era el genio de Villa Fiorito y el otro su jovencísimo representante.

Hace 40 años ambos empezaron a transcurrir una vida de película que se prolongó desde 1977 hasta 1985. Diego lo transformó en socio de "Maradona Producciones". En Barcelona, siendo Maradona ya gran figura en Europa, una fuerte "interna" dividió "aguas" y negocios.

La vida los llevó por caminos diferentes. Cyterszpiler, más grande que Diego, finalizó imprevistamente hoy su vida al caerse desde el séptimo piso del hotel "Faena", en Puerto Madero. "Depresión aguda", comentaron sus allegados.
"El final de su relación sentimental profundizó este momento, al punto de necesitar un acompañante terapéutico", dijeron quienes estaban cerca suyo en este tiempo.

En 1984, cuando Diego estaba convaleciente en Barcelona de una severa lesión causada por el defensor vasco Andoni Goikoetxea, de Athlétic de Bilbao, en el tobillo izquierdo, había dos grupos que rodeaban al genio. En Cataluña, parte del periodismo comentó que el futbolista "estrella" y "no su entorno", complicaba los cuidados para su restablecimiento.

César Menotti, técnico del 'Barsa', "no se opuso" por eso a la transferencia de Diego al Nápoles, donde ganó Liga italiana y UEFA. Por eso lo aman allá.

Los dos argentinos célebres ganaron "Copa del Rey", pero la Liga española se la llevó Real Sociedad, del país vasco. Los mejores recuerdos de la época del Niño Prodigio allí.

Barriadas de Villa Devoto, Villa del Parque, La Paternal y Villa Mitre acuñan recuerdos de pibes con el cabello ensortijado. Sonrienes, ganadores. Plena campaña de Argentinos Jrs. subcampeón Metro´80. Vecinos, personas mayores, que no olvidan.

Tiempos del fenómeno Maradona. Cuando lo iban a ver de todos los otros clubes. El recuerdo remite a ambos, Diego y Jorge, saliendo del barrio de Villa Devoto. De la casa que le había regalado a sus padres.

Con un Ford Taunus, negro, modelo con diez años de uso, recorriendo calles de Villa del Parque hasta llegar al estadio de Argentinos Juniors con Diego sentado al costado, sobre la ventanilla del acompañante, saludando a todos. Eran dos chicos felices.