Una previa muy movida

Por eduardo tucci

No fueron tranquilas las horas previas a la presentación formal de Jorge Sampaoli como nuevo responsable del equipo nacional. Cuando llegó el momento de las definiciones en materia contractual la tensión dominó el escenario, fundamentalmente porque desde la dirigencia se habrían desconocido algunos acuerdos previos que demoraron la cuestión y molestaron al DT.

Finalmente, el hombre que desembarcó en el país después de 15 temporadas en el exterior, tuvo que resignar dinero antes de presentarse por primera vez en su vida en el predio de Ezeiza y de emprender viaje a Melbourne para dar comienzo a su trabajo.

Los que han seguido de cerca cada uno de los encuentros entre las partes destacaron que la firma de los papeles empezó a dilatarse porque algunos de los temas acordados “de palabra” empezaron a cambiar. Más allá de algunas afirmaciones (”Es un orgullo tener al mejor técnico del mundo”, disparó el “Chiqui” Tapia los últimos días) y de la enorme ilusión que arrastraba desde siempre el hombre de Casilda con respecto a la Selección, en determinado momento las negociaciones se empantanaron y costó bastante bajarle el tono a la controversia.

Según precisiones que tomaron estado público de fuentes cercanas a los encuentros entre el DT y la dirigencia afista, Sampaoli pretendía ganar 2.500.000 dólares anuales excluyendo de esa cifra los sueldos del resto de los integrantes del cuerpo técnico. La cifra –después de muchas idas y vueltas no exentas de encontronazos— habría bajado a US$ 1.700.000 más el grupo de trabajo, aunque los haberes de algunos colaboradores extra estarán a cargo del entrenador.

El número final marcó sensibles diferencias con los montos de otras ofertas que le habían llegado (se habla de hasta cuatro millones de euros y muestra a a las claras del interés que tenía el santafecino por sentarse en el banco argentino. “Deja de ganar dinero y, si deportivamente le va mal, a los 57 años las puertas de la elite de Europa no se volverán a abrir”, le dijeron hombres muy cercanos a Sampaoli a un diario capitalino.

De todas formas las licencias económicas concedidas por el hombre nacido en Casilda no sólo abarcaron a su sueldo ya que, de alguna forma, él terminará pagándole al Sevilla una parte de la cláusula de rescisión de 1.500.000 euros al resignar los 830.000 euros que el club español le debía abonar por sueldos y premios atrasados. Entre ellos, Sampaoli resignó un percibir una jugosa suma por haber superado los 70 puntos en la Liga de España y acceder a la próxima edición de la Champions League.

Los cruces de los días previos a la asunción no sólo tuvieron que ver con el dinero ya que también se planteó una disidencia en torno a la duración del contrato entre el conductor y la AFA. Inicialmente Sampaoli había insinuado que el vínculo se extienda hasta el Mundial de Quatar 2022 mientras la dirigencia argentina planteó que el arreglo sólo se extendería por los cuatro partidos que restan de las Eliminatorias –ante Uruguay, Venezuela, Perú y Ecuador—con una promesa de extensión hasta Rusia, de concretarse la clasificación. Finalmente prosperó la posición del DT y el vínculo se estableció hasta Qatar 2022.

Sampaoli finalmente concretó su sueño pero debió ceder posiciones para acceder a la oportunidad que estaba buscando desde hace muchísimo tiempo. Arranca un ciclo clave para la Selección dominado por los apremios y la necesidad de no volver a equivocarse.