Bajó de una moto, sacó una escopeta y empezó a tirar: un herido en Villa Montoro

De película o, una acción típica de la que se ven frecuentemente en los barrios más conflictivos de nuestra región (ver págs. 20 y 21): un hombre se bajó de una moto, sacó una escopeta y empezó a tirar contra una propiedad situada en Villa Montoro. ¿El resultado? Un herido y muchísimo miedo.

El violento episodio, que trascendió ayer, ocurrió el sábado por la noche en las calles 97 y 117.

Allí, de acuerdo a lo que pudo saber este diario, se encontraban reunidos los integrantes de una familia, como lo hacen habitualmente.

El que no estaba invitado era un hombre que, cerca de las 21.40, se acercó hasta esa vivienda y por el pequeño resquicio de una puerta que no quedó del todo cerrada, empezó a abrir fuego.

Demencial, salvaje, bestial. Cualquier calificativo aplica para graficar la acción, que quedó registrada por una cámara domiciliaria.

Por eso ya todos saben quién es el autor de los disparos, que fueron varios y también impactaron contra puertas y vehículos estacionados por la zona.

Un hombre identificado por los voceros como Oscar Maldonado, de ocupación albañil, es quien se llevó la peor parte en esta violenta historia, ya que un tiro le pegó de lleno en el abdomen y provocó que, tras una intervención quirúrgica de urgencia en el Policlínico San Martín, adonde lo llevaron de urgencia, los médicos “tuvieron que sacarle 20 centímetros de intestino”.

Ahora, al cierre de esta edición, continuaba internado en estado reservado.

MAS VIOLENCIA

Las fuentes indicaron que, previo a este ataque a escopetazos, la misma persona se habría presentado en la vivienda de su ex pareja, situada en barrio Aeropuerto y, con quien tiene dos hijos, para presuntamente efectuar varios disparos, que no lastimaron a nadie de milagro.

Respecto del móvil de la agresión en la finca de 97 y 117, se dijo que el hombre baleado es primo de una mujer con quien el sospechoso habría mantenido una relación sentimental.

En el hecho tomó intervención la UFI Nº 11 de Alvaro Garganta y, la comisaría de Villa Ponsati, que se abocaron a la búsqueda del prófugo y de al menos un cómplice.