Homenaje a Juan Pablo II y a Plácido Marín, el creador del asilo para ancianos

Así como algunas de las arterias platenses rememoran figuras políticas, a la 15 se le asignaron el de personalidades ligadas estrechamente a la filantropía y al culto católico

Edición Impresa

La calle 15 lleva, en dos sectores distintos, los nombres de San Juan Pablo II (1920-2005) y del Dr. Plácido Marín (1853-1929).

La figura del sumo pontífice católico que visitó nuestro país en dos recordadas ocasiones, en 1982 y 1987, es mucho más conocida que la del abogado que trascendió por sus grandes obras filantrópicas y que además, pese a no estar ligado por vínculos afectivos ni profesionales a La Plata, construyó el conocido Asilo Marín para adultos mayores con necesidades económicas insatisfechas y falta de contención familiar, sitio en el que fue sepultado junto a los restos de su esposa, Andrea Ibáñez, quien falleció en 1901.

Los restos de Marín yacen en una cripta junto a los de su esposa, Andrea Ibáñez

 

Marín nació en el seno de una familia adinerada, se recibió de abogado en la universidad porteña y ejerció su profesión de forma destacada; se casó con Andrea Ibáñez, proveniente también de una familia acaudalada.

Tras fallecer su madre, Marín donó una considerable fortuna para construir en la localidad de Béccar, partido de San Isidro, el Colegio “Carmen Arriola de Marín”, pondiéndole el nombre de su progenitora en homenaje a ésta. El establecimiento educativo actualmente atiende los niveles de enseñanza inicial, primaria y secundaria y goza de gran prestigio.

En San Isidro también hay una calle con el nombre del Dr. Plácido Marín.

Al morir su esposa en 1901 y sintiéndose desolado, Marín emprendió un largo y solitario viaje por Tierra Santa primero y luego por algunos países de Europa en donde conoció distintos tipos de asilos.

De regreso en Argentina decidió levantar en la provincia de Buenos Aires un asilo para ancianos, para lo cual consultó a su amigo, Mons. Juan Nepomuceno Terrero, quien en 1901 había asumido como el segundo arzobispo de nuestra ciudad, desempeñándose como tal hasta su deceso en 1921.

Terrero le sugirió que construyera en La Plata el asilo para ancianos, para lo cual Marín adquirió la manzana delimitada por las calles 15, 16, 60 y 61. Allí levantó una enorme edificación con grandes comodidades, la que hoy en día se mantiene con el mismo destino que le diera su benefactor.

La obra donada a la iglesia católica se inauguró en 1908 designando al asilo con el nombre de Andrea Ibáñez de Marín, en homenaje a su difunta esposa, cuyos restos fueron trasladados a una cripta especialmente construida en la capilla del complejo edilicio.

Al fallecer el Dr. Plácido Marín en 1929, su cuerpo fue inhumado en la misma cripta junto al de su mujer.

Como en esa época la calle 15 era una de las tantas arterias platenses que no tenía nombre, el Concejo Deliberante aprobó pocas semanas después del fallecimiento del filántropo la Ordenanza Nº 93/1929, designando a aquella arteria con el nombre de Dr. Plácido Marín en toda su extensión.

SAN JUAN PABLO II

La Ordenanza 10.271, aprobada por el cuerpo legislativo platense el 23 de mayo de 2007, dispuso designar con el nombre de Juan Pablo II a la calle 15 de 32 a 60, por lo que el nombre de Marín quedó restringido al tramo que va de 60 a 72.

Juan Pablo II, fallecido el dos de abril de 2005, fue canonizado por el Papa Francisco el 27 de abril de 2014.

Juan Pablo II le da nombre a la calle en el tramo que va desde 32 hasta 60

 

El Papa polaco visitó la Argentina por primera vez durante 31 horas entre el 11 y 12 de junio de 1982 cuando concluía la guerra de las Islas Malvinas, volviendo al país el 6 de abril de 1987 permaneciendo seis jornadas, hasta el día 12; en esa ocasión, el pontífice visitó nueve provincias.

En ambas visitas al país, el Papa Wojtyła ofició sendas misas en Luján y en la ciudad de Buenos Aires, y a cada una de ellas concurrieron numerosos grupos parroquiales de La Plata.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE