Horror en Punta Lara: “Quería que se terminara ya”

Días después de que la fiscal Virginia Bravo pidió elevar a juicio la causa por la violación y crimen de María Emma Córdoba (26), en Punta Lara, la joven que vivió y sobrevivió a ese horror habló por primera vez con la prensa. En el programa El Expediente (C5N), Ana Laura (26) dio algunos detalles de la terrible madrugada del 8 de julio del año pasado, cuando un hombre ingresó en la casa de su amiga, las torturó, violó y golpeó a Córdoba hasta matarla. Por el caso está detenido Ariel Osvaldo Andrés Báez (23), con preventiva, reconocimientos y pruebas de ADN en contra.

Ana Laura contó que esa noche, camino a la casa de María Emma, se cruzaron con Báez, quien las interceptó, aunque no recuerda “con qué argumento. Nosotras seguimos. No le dimos importancia”.

“Cenamos, tomamos cerveza y como llovía dijimos vamos a abrirles a los perros”, momento en que Ana Laura vio al agresor irrumpir con un arma: “Entró preguntando por el ex de María, diciendo que no nos iba a pasar nada”, contó la joven. Recordó que “nos hizo subir a la planta alta y nos obligó a desvestirnos. Emma quiso defenderse y el siempre la sometía. Después nos ató y nos intentó quemar con un aerosol y un encendededor. Como no pudo, prendió una frazada y bajó, siempre con el arma en la mano”.

“Fue una eternidad, quería que se terminara ya”, reconoció la joven, agregando que, ya en la planta baja, el asesino les pegó “con una pala, nos roció con alcohol y se fue”.

Dijo que “muchas veces pienso en Emma como si la fuera a ver en cualquier momento y cuando caigo en la realidad duele muchísimo”. Explicó que con tratamiento psicologico en un hospital y que su vida cambió drásticamente después del hecho: “No ando sola de noche. Casi no ando, básicamente. Viene alguien caminando y se me sube el corazón a la garganta”, aseguró.

Consultada sobre la pena de muerte, reveló que prefiere que el asesino “esté vivo. Las cosas se pagan en vida”.