Trágico derrumbe de un puente peatonal sobre una conocida autopista en Miami

Los bomberos confirmaron el hallazgo de cuatro muertos, pero podría haber más. Hay personas atrapadas

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MIAMI

Un número indeterminado de personas murió ayer y al menos dos están en estado crítico al derrumbarse un innovador puente recién instalado sobre varios vehículos que circulaban en la conocida autopista Calle Ocho de Miami (EE UU).

La sección derrumbada del puente, de 950 toneladas de peso y 53 metros de longitud, aplastó a una docena de autos, algunos de ellos en forma parcial, por lo que sus ocupantes pudieron ser rescatados y trasladados a hospitales cercanos.

Por lo menos diez heridos llegaron al hospital Kendall Regional Center, según señaló en rueda de prensa el cirujano jefe de este nosocomio, Mark McKenney, quien precisó que dos de ellos están en condición crítica. Uno de ellos llegó con un paro cardíaco y “prácticamente muerto”.

Más de un centenar de miembros de equipos de rescate trabajaban anoche en la zona con la ayuda de perros entrenados y con experiencia en huracanes y terremotos a nivel nacional e internacional.

Aunque la certeza de que hay víctimas mortales es total, al cierre de esta edición las autoridades no habían dado cifras exactas de cuánta gente pudo fallecer en el suceso, aunque los bomberos confirmaron el hallazgo de cuatro cuerpos y el vicealcalde del condado de Miami-Dade, Maurice Kemp, aseguró que son “múltiples” los decesos.

El trabajo de los bomberos está centrado en “asegurar la estructura” para poder desplazarse por debajo y rescatar a eventuales sobrevivientes.

Para ello se colaron micrófonos entre los escombros, buscando escuchar algún tipo de sonido por parte de los sobrevivientes. Los helicópteros de las cadenas de televisión recibieron la orden de abandonar el área para no interferir en esa tarea.

El puente peatonal tenía por objeto conectar varios edificios de departamentos de estudiantes situados en el suburbio de Sweetwater, en los que viven cerca de 4.000 alumnos, con el campus principal de la Universidad Internacional de Florida (FIU).

La construcción del puente comenzó en la primavera boreal de 2017 y se esperaba que concluyera a comienzos de 2019, y el sábado pasado se instaló precisamente sobre los pilares la estructura principal, que estaba previsto que se sujetase por medio de cables de tensión.

Testigos presenciales aseguran que a la hora del suceso el semáforo de la intersección cercana estaba en rojo, por lo que los vehículos estaban detenidos cuando se desplomó la estructura, indicó el “Miami Herald”.

La sección del puente se desplomó en la tarde por causas aún desconocidas, sobre la famosa Calle Ocho a la altura de la Avenida 109, indicó el jefe de policía local, Juan Pérez, quien agregó que se tratará de una investigación que durará “mucho, mucho tiempo”.

Esta pasarela de 14,2 millones de dólares, cuyo método de “construcción acelerada” reducía, según FIU, el “riesgo potencial a trabajadores, vehículos y peatones”, se inició para evitar el peligro que suponía para los alumnos el cruzar los ocho carriles de la Calle Ocho, como el caso de una joven que falleció en agosto pasado.

Una de las compañías constructoras, Munilla Construction Management, especializada en grandes obras civiles, emitió un comunicado en el que lamentó la “terrible tragedia”, y prometió colaborar con la investigación. La compañía de ingeniería FIGG indicó en otro comunicado que en sus 40 años de historia nunca “había pasado nada como esto”.

El alcalde del condado de Miami-Dade, Carlos Giménez, indicó al diario “Miami Herald” que al momento del derrumbe se estaban realizando una serie de “pruebas de resistencia” y que había trabajadores en la obra. La Casa Blanca informó que el presidente Donald Trump sigue de cerca lo sucedido. (EFE)

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