Demoran a otros dos menores por las amenazas de bomba sin fin a las escuelas de la Región

Tienen 14 y 17 años. Les incautaron los celulares desde los cuales se hicieron los llamados. Ayer hubo al menos siete intimidaciones

Edición Impresa

La saga de amenazas de bomba que tiene en jaque a las escuelas de la Región sumó anoche un nuevo capítulo, cuando dos adolescentes fueron demorados por la Policía acusados de ser los autores de las intimidaciones a dos colegios platenses.

A partir de una investigación que se inició por los llamados amenazantes que recibieron días atrás en el colegio Liceo Mercante y en el industrial Albert Thomas, agentes de la comisaría primera de nuestra ciudad allanaron en las últimas horas tres viviendas, en las que dieron con los presuntos autores de las amenazas. Se trata de un joven de 14 años y de otro de 17 que serían alumnos de las mencionadas instituciones educativas.

Los procedimientos, según se detalló, se realizaron a partir de una investigación a cargo de la fiscal María Cecilia Corfield, de la UFI 15 y el Juzgado de Garantías 4, de Juan Pablo Masi. Se realizaron en viviendas de 117 entre 73 y 74; 82 bis entre 30 y 31 y de 94 entre 2 y 3.

Hasta allí llegaron tras las pesquisas telefónicas, dato clave para dar con los autores. El procedimiento indica que ante cada falsa denuncia al 911, desde la fiscalía solicitan a las empresas de telefonía que les informen sobre la titularidad de las líneas desde la cual se hicieron los llamados. Las empresas tardan entre tres y diez horas en responder a esos requerimientos.

Con esa información, los investigadores llegaron hasta las propiedades donde viven los sospechosos (94 entre 2 y 3 y 117 entre 73 y 74). Los jóvenes tenían en su poder los teléfonos móviles que la Policía buscaba. Los equipos fueron incautados en el marco de la causa que se abrió por “intimidación pública”.

Si bien por tratarse de menores de edad los implicados fueron rápidamente entregados a sus padres, ahora la Provincia podrá promover una demanda civil para que los adultos se hagan cargo de los costos del operativo, se indicó.

“Los costos que generan lo operativos deberán ser cubiertos por las demandas”, insistieron desde la Provincia al explicar la decisión oficial que busca frenar la escalada de intimidaciones.

Estos sospechosos se suman a otros que habían sido identificados en el marco de distintas causas. Anteanoche, sin ir más lejos, personal de la comisaría primera de Berisso realizó un allanamiento en una propiedad de 171 entre 27 y 28 de esa localidad, donde secuestró el teléfono celular desde el cual se hicieron llamadas intimidatorias a dos escuelas, la Media 1 y la Técnica 2. La sospechosa es una chica de 17 años, que quedó identificada.

UNA OLA SIN FIN

Las intimidaciones a las escuelas se han convertido en un problema mayúsculo para las comunidades educativas. Los alumnos pierden días de clase, cada evacuación pone en riesgo a los chicos, los padres ven alteradas sus rutinas porque los tienen que ir a retirar y los docentes temen por su responsabilidad civil ante cualquier eventualidad que se produzca mientras esperan con los chicos en la vía pública.

Ayer otra vez se produjeron al menos siete amenazas de bomba en distintos establecimientos educativos de la Región, como la escuela Nº 41, de 139 y 520, que recibió dos llamados en un día.

A esa lista se sumaron la Escuela Manuel Belgrano, de 9 y 38; el Colegio San Juan Bautista, de 520 y 141; y la Escuela San Francisco de Asís de Villa Elisa.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE