Investigan si un guardia “infiel” guió un robo nocturno en un hipermercado
Edición Impresa | 23 de Agosto de 2018 | 02:08

De madrugada, se tiraron de cabeza sobre el sector de los electrónicos y metieron en la bolsa decenas de teléfonos celulares, equipos de audio y auriculares. No estaban comprando y no son de la Ciudad, pero por las sospechas que tienen los investigadores, conocían las instalaciones y las medidas de seguridad del hipermercado Walmart con detalles finos. Se trata de dos ladrones de la zona sur del Conurbano que en la madrugada de ayer dieron un golpe en el predio situado en Ringuelet.
Según informó la Policía, en el camino hacia el botín sorprendieron al sereno en la zona el estacionamiento y a cara descubierta lo sacaron del combate mediante la amenaza con un arma de fuego.
De esa forma, consiguieron impunidad para sus movimientos y la tarjeta que permite destrabar las cerraduras electrónicas para pasar hacia el salón de ventas. Ya en el interior, se dirigieron a la zona “tecno” y llenaron varias bolsas. La hipótesis de trabajo de los investigadores de la comisaría sexta indica que ahí podría haber una clave que permitiría entender la organización del golpe, con información de un empleado de seguridad “infiel” y la memoria de otro ex integrante del mismo sector.
“Entregamos la mercadería que le incautamos a los dos ladrones a los representantes de la empresa. Luego, nos llama el encargado del lugar y nos dice que uno de los celulares que había en las bolsas era usado. Resulta que le pertenece a uno de los detenidos y se mensajeaba desde ese aparato con alguien que trabaja en el mercado”, indicó uno de los investigadores de la Policía.
Mensajes de WhatsApp
Siempre según la información policial, en un primer análisis de ese teléfono realizado en el mercado, cuando advirtieron que no era uno de los robados, se detectó que “los mensajes de WhatsApp que mandaba el empleado tenían indicaciones sobre cómo tenían que hacer para poder entrar a robar”.
Con esa información, los efectivos de la comisaría sexta se fueron hacia el súper y le pidieron explicaciones a un custodio de 35 años, quien fue llevado a la seccional de Tolosa y quedó identificado en la causa.
“Dale, tenés que meterte de este modo, ir por acá, meterte por allá. Dale que nosotros te hacemos la segunda”, contó la fuente consultada sobre la parte del intercambio que comprometería al empleado.
En las bolsas con mercadería hallaron un teléfono usado, que era de uno de los detenidos
En la Sexta estaban desde la madrugada un hombre de 40 años con domicilio en Quilmes y otro de 22 del distrito de Avellaneda. El primero registra antecedentes en el área de seguridad del mismo mercado al que se lo acusa de haber robado ahora.
Según el informe que realizó la Policía, ambos apuntaron con una pistola al sereno de Walmart y luego se dedicaron durante un buen rato a saquear productos. “Los ladrones habían entrado saltando un alambrado perimetral, pero a la salida necesitaban pasar por la puerta, por las bolsas que cargaban. No pudieron porque el sereno había tirado las llaves cuando lo apuntaron con el revólver. Entonces, quedaron en el playón y lo detuvimos”, indicó la fuente.
Rastrillaje
El trabajo de los policías, en la jornada de ayer también incluyó la realización de rastrillajes en las inmediaciones del predio comercial situado entre los caminos Belgrano y Centenario, a la altura de la intersección con la calle 515.
Según se informó, así se logró recuperar el arma que los ladrones habría utilizado para amenazar al joven de 23 años que cuida el centro comercial por la noche.
Los efectivos hallaron un revólver marca Italo, dentro de un zanjón que corre junto a la calle 512, en inmediaciones del hipermercado.
Los acusados por robo agravado fueron puestos a disposición de la Justicia en una investigación penal que recayó en la UFI Nº 3, a cargo del fiscal Marcelo Martini.
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