Cómo conservar la carne

Guardar la carne envasada al vacío es una muy buena alternativa, porque puede durar de 90 a 120 días, es decir de 3 a 4 meses, desde la fecha de envasado. Dado que la carne al vacío implica que se le ha sacado el aire a la carne para detener su proceso de descomposición normal, es importante verificar que la bolsa no tenga, justamente, aire. Hay que fijarse que tenga solo líquido y no burbujas de oxígeno, porque eso quiere decir que perdió el vacío.

Cuando se abre la bolsa, el producto no debe tener ningún olor a descomposición o que sea extraño para el consumidor.

De acuerdo a las normas de conservación, la carne en la heladera se conserva de 1 a 2 días y fuera de ésta no más de 2 horas. También es importante considerar que la carne congelada debe cocinarse dentro de las 12 horas a partir de su descongelamiento.

Cuando se va a congelar un corte se recomienda hacerlo lo más rápido posible. Al momento de consumo, descongelar lo más lento posible para no alterar sabor y textura de la carne, cambiando del congelador a la heladera, para que sea en un proceso lento y seguro de descongelación y así evitar la descomposición.

Si se descongela, no volver a congelar y consumir preferentemente durante la semana, recomiendan los expertos.

Los trozos de carne duran alrededor de entre 3 y 5 días en la heladera, mientras que el pollo crudo dura sólo entre 1 y 2 días. Las sobras de carne cocida aguantan en el refrigerador hasta 3 y 4 días, mientras que la carne picada solo se puede guardar por 1 ó 2 días.