Explotan de bronca por una chimenea que los tapa de polvillo en la zona de 520 y 131

Viviendas, autos, patios, bebederos de animales y hasta piletas de natación amanecen desde hace varios meses, en la zona de 520 y 131, completamente cubiertos de un  extraño polvillo. Según acusan vecinos damnificados, el inconveniente es ocasionado por el incesante funcionamiento de una chimenea correspondiente a una industria de línea cementera que se encuentra en el cruce de ambas avenidas.

En sus reclamos de larga data -de varios años atrás- y que ahora retoman con miras a que las autoridades intervengan a fin de darle tratamiento y solución, los afectados especificaron que el principal y más preocupante inconveniente es la contaminación del aire provocada por el polvillo emanado por la chimenea en cuestión. “Todavía no sabemos qué estamos respirando”, enfatizaron con suma preocupación.

Mientras que en segundo orden, y aunque no menos importante ya que también encierra un drama cotidiano, es que esa sustancia que se desplaza varias cuadras a la redonda queda impregnada en los hogares provocando un gasto económico extra a las familias, ya que para quitarlas de algunas superficie requieren de "grandes y costosos trabajos de mantenimiento". 

"Donde más cuesta limpiar es en las viviendas con tejados, ya que este polvillo o hollín se adhiere con más fuerza", afirmaron desde barrios aledaños.

Retornando a la faceta más preocupante en torno a esta emanación de polvillo, señalaron que "a pesar de que se vienen realizando planteos y reclamos, parece que todavía no se hizo ningún estudio o evaluación para medir el grado de contaminación que eventualmente podríamos estar siendo sometidos los vecinos".

E insistieron que por estos problemas, al estar en juego la salud y la economía de las familias que viven cerca de esa planta industrial, "es de vital importancia que las autoridades integren este tema en su agenda".