Hicieron un boquete en el techo de una casa y se llevaron hasta las cámaras

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En una zona del barrio Hernández los vecinos declaran estar a merced de bandas delictivas que actúan con inteligencia previa, lo que quedaría demostrado con el escruche ocurrido en una vivienda situada en 133 entre 519 y 519 bis.

Ocurrió en la madrugada de ayer, cuando los dueños estaban de vacaciones fuera de la Ciudad. Seguramente contando con ese dato, ladrones treparon al techo de la propiedad, donde luego de levantar algunas chapas rompieron el cielorraso de yeso y abrieron un boquete que les permitió colarse en el interior por el sector del vestidor.

Ya dentro del domicilio, se dedicaron fundamentalmente a buscar dinero, dejando de lado a otros objetos de valor como televisores y electrodomésticos. Lo que sí se llevaron fueron las cámaras de seguridad de la casa y el soporte de grabación del sistema.

Esta modalidad delictiva registra un antecedente reciente en Ringuelet, donde la banda ingresó en una propiedad también levantando las chapas del techo de una casa.

“ANGUSTIADOS Y ABANDONADOS”

Los vecinos de ese sector de Hernández se sienten en la mira de estos grupos de delincuentes que se manejan como profesionales. Reconocieron que se encuentran en “estado de alerta permanente, angustiados y abandonados, tanto por el Estado municipal como por el provincial”. No sin lamentar la “ausencia de personal policial” y “cámaras de vigilancia de la Municipalidad” en esa zona, reprocharon: “Parece que están esperando que asesinen a alguno para hacer algo”.

Paralelamente, denunciaron que “los patrulleros no pasan con frecuencia“ y que la Policía “no nos puede dar una solución a la grave problemática de los robos”.

“Como si fuera poco, desde el municipio no son capaces, aunque sea, de mantener las calles en condiciones ni tampoco bien iluminadas”, se quejaron, resaltando que ellos mismos debieron encarar una colecta para “arreglar las calles porque eran imposibles de transitar”.

Este barrio de Hernández hace largas semanas que viene sufriendo robos es sus viviendas.

Habitantes del lugar recordaron que, por ejemplo, el pasado 17 de enero, cerca de las 10 de la noche, un grupo comando “reventó” un portón de madera al utilizar una camioneta Audi color gris. La metodología que utilizaron, se indicó, fue la de colocar el vehículo en reversa y con el paragolpes tumbar el portón.

Luego entraron en la vivienda a robar. “Aquella vez la suerte quiso que no se tuvieran que lamentar vidas, porque los propietarios no se encontraban en la casa, pero balearon el auto del hijo del propietario cuando casualmente llegaba al lugar con su esposa e hija, quienes podrían haber muerto o ser heridos heridos de bala”.

Entre las penurias de los vecinos del barrio por el accionar delictivo, hay que sumar el robo ocurrido a 100 metros de los descriptos anteriormente, en una madrugada de fines de octubre último.

En aquel caso los delincuentes los ladrones envenenaron a los perros de la familia, a la que, a su vez, mantuvieron de rehenes. Golpearon al dueño de casa y robaron elementos de valor y el auto de los damnificados.

 

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