El Código Penal le dio a Boca el pasaje a cuartos

Boca encontró su desahogo. Después de protagonizar un mal partido, donde anoche, el Inter se impuso en los ´90 por 1-0 (1-1 en el global), en la revancha, el equipo que conduce Miguel Ángel Russo se ratificó y por la vía de los penales (5-4) se clasificó para disputar los cuartos de final de la Copa Libertadores, donde ahora lo espera Racing, que dejó en el camino nada menos que al vigente campeón, Flamengo.

El comienzo del partido fue muy protestado, cortado y picante. Tal es así que al minuto, Moisés fue amonestados por una fuerte entrada a Julio Buffarini. Y a los 4, el mismo defensor de Inter, le aplicó un planchazo a Carlos Tevez, que no percató el árbitro Tobar.

Inter, después de un inicio pasado de rosca, trató de manejar la pelota a partir del trabajo de Edenilson y de la claridad para armar los ataques de Praxedes. A los 9, Guilherme fue asistido por derecha por Patrick, pero su disparo no trajo demasiadas consecuencias para Andrada.

De todos modos, Boca debió mantenerse siempre concentrado, porque el Inter, salió con plena determinación y dispuesto a jugársela, conociendo el resultado de la ida y tratando de ahogar permanentemente la salida del local.

A los 17, una buena combinación entre los volantes del Inter terminó con un disparo a “quemarropa” de Thiago Galhardo que se estrelló en el travesaño. Advertencia para Boca.

Al equipo de Russo le costó acomodarse en la cancha. Y los desacoples del medio hacia atrás, le permitió al Inter manejar los hilos del partido. Patrick y Edenilson se cargaron el equipo al hombro, y gracias al trabajo de ambos, Boca la pasó bastante mal.

A los 27, Patrick le hizo un “nudo” a Buffarini, mandó centro y Praxedes encontró bien parado a Andrada. Y tres minutos más tarde fue un cabezazo de Galhardo, que volvió a encontrar bien parado al arquero local.

Boca se fue al descanso exhibiendo un juego totalmente adverso al que venía mostrando. Atónito y sin reacción. Inter lo desbordó en todas las líneas, fue el que impuso su juego a lo largo de los primeros 45 minutos y el que generó las mejores opciones de peligro.

Si no fuera por el accionar de Esteban Andrada, el gran responsable del empate parcial sin goles, la historia hubiese sido otra al cierre del primer capítulo.

sorprendió de entrada gracias a un gol en contra

Inter, mostrando el mismo nivel que exhibió en el primer capítulo, pegó de entrada. Iban solo 3 minutos cuando Moisés, tras capitalizar un cierre corto de Buffarini, encaró por izquierda, tiró el centro por bajo, y Frank Fabra, en su afán de despejar, no hizo más que vencer su propio arco. Fue un golpe al corazón de Boca, que seguía sin reaccionar ante la permanente presión del equipo de Porto Alegre.

Después del golpe, Boca insinuó una reacción, a partir del trabajo de Carlos Tevez y del empuje de los volantes y de Buffarini, que se mandó al ataque de manera permanente. También levantó su nivel el Toto Salvio, sobre todo, cuando apareció los derecha.

Cardona intentó clarificar la pelota, mientras que Villa se las ingeniaba por izquierda para ganar en velocidad y encontrar espacios.

Mientras que Inter, sin salir de su libreto, apostó a la recuperación rápida de la pelota y a la distribución limpia, sobre todos por los laterales.

La más clara de Boca fue a los 12, cuando Tevez, sacó un remate alto que Marcelo Lomba mandó el córner con un manotazo.

Durante varios minutos, el elenco local controló el partido, pero sin sorpresas para lastimar. Russo movió el banco con los ingresos de Jara y Obando, pero quizás el más importante fue el aporte del juvenil, quien le dio otra frescura al ataque, donde Villa (reemplazado) no pudo imponer su habitual cuota de velocidad ni tampoco fue sorpresa.

Después de los 20, Boca se mostró mejor. Los volantes ajustaron las marcas, y a partir de allí, comenzaron a gestarse jugadas colectivas interesantes, algo que no se había visto en el primer tiempo.

Aunque en defensa, exhibió algunas fisuras que fueron bien resueltas por Izquierdoz, la figura de su equipo. A los 37, Cuesta estuvo cerca de marcar el segundo gol, tras aprovechar un grosero error de Esteban Andrada. El triunfo del Inter quedó inalterable hasta el final, por lo que hubo que definir el pleito a través de los penales.

Y por esa vía, Boca tuvo más eficacia, por eso, obtuvo el triunfo por 5-4 y en pasaje a la otra ronda.

El juvenil Obando, que ingresó en la segunda mitad, fue expulsado a instancias del VAR