Gimnasia perdió un partido increíble: jugó mejor, pero Banfield se lo ganó con un gol sobre la hora de penal

El partido que perdió Gimnasia esta noche ante Banfield, por 2-1, es difícil de explicar: arrancó mal con un gol tempranero de Agustín Fontana, pero luego fue el claro protagonista del encuentro y llegó al empate a través de Matías García en el complemento. Pero a falta de quince minutos Marcelo Weigandt se fue expulsado y, ya en tiempo de descuento, Jesús Dátolo le dio la victoria al local con un tanto a través del punto penal. Mereció, al menos, quedarse con un punto.

Con estos tres puntos, el Taladro quedó como único líder del grupo con 6 unidades, Talleres es el escolta con 4 y Gimnasia aparece en la tercera colocación con 3. En la próxima fecha el conjunto albiazul enfrentará a los cordobeses.

El árbitro Darío Herrera quedó en el ojo de la tormenta, ya que junto a sus colaboradores tuvieron varios fallos. Por el lado albiazul le reclamaron, tras el pitazo final, no haber cobrado dos penales. Víctor Ayala fue uno de los que más enojados se fue con el colegiado.

Yendo al trámite del juego, el gol del Taladro llegó en el primer minuto del encuentro: tras una pelota parada muy cerca del área, producto de una infracción de Paolo Goltz a Mauricio Cuero, Fontana aprovechó una pelota que quedó abollando en el área y venció la resistencia de Jorge Broun.

Pero el gol recibido no fue la única mala noticia para Gimnasia en el inicio: a los 5 minutos Goltz, uno de los puntos altos del equipo en este 2020, sintió un fuerte dolor en la pierna derecha que no le permitió continuar. Si bien le tendrán que hacer estudios, se sospecha que pueda ser un desgarro. En su lugar ingresó Leonardo Morales.

Tras este arranque para el olvido, el elenco de nuestro ciudad se fue acomodando con el correr de los minutos hasta que se convirtió en protagonista. Inclusive tuvo varias situaciones claras de gol que podrían haber significado la igualdad: la más clara fue un tiro libre ejecutado por Victor Ayala que hizo lucir a Iván Arboleda.

Quien también tuvo el empate fue Weigandt, quien capturó un centro dentro del área con su cabeza y la pelota se fue apenas desviada por encima del travesaño. El lateral viene de convertirle un gol a Colón la fecha pasada.

Siendo dueño de la posesión de la pelota, y habiendo inquietado en varias ocasiones al arquero del Taladro, el Lobo no mereció irse al entretiempo perdiendo, pero pagó muy caro haber arrancado dormido el encuentro.

GIMNASIA LO PERDIÓ SOBRE EL FINAL

Gimnasia arrancó con todo en el segundo tiempo y, antes del minuto, tuvo una doble chance para empatar en la que respondió muy bien Arboleda: primero remató Matías Melluso, mientras que en el rebote Ayala sacó un fuerte remate que el arquero mandó al córner desde el suelo.

Pero a la jugada siguiente, el equipo tripero finalmente logró la igualdad: tras un centro de Aleman, que se encontraba en posición adelantada, García apareció en el corazón del área y de cabeza marcó el 1-1. Todo como al principio.

Tras el gol, Gimnasia siguió dominando la posesión del balón e imponiendo su juego en el estadio Florencio Sola. Por el lado de Banfield, el entrenador Sanguinetti decidió mover el banco de suplentes al ver que su equipo no estaba teniendo un buen rendimiento. 

A los 27 minutos, y cuando seguía mostrándose mucho mejor el Lobo, Weigandt le entró duramente a Urzi y el árbitro Herrera no dudó: roja directa. De esta manera, el conjunto albiazul debió jugar con uno menos el último cuarto de partido.

Minutos más tarde el juez le perdonó la vida a Ayala, quien cometió una dura infracción a Bravo que pudo haberle costado la expulsión. Para suerte del futbolista paraguayo y Gimnasia, solamente recibió la amarilla.

La expulsión, sin dudas, cambió el trámite de juego: Banfield se animó más y empezó a ganar protagonismo, mientras que el Tripero se vio obligado a replegarse al estar en desventaja numérica.

Cuando parecía que la historia terminaba 1-1, en el sexto minuto de adicionado llegó el segundo gol para el local: Patricio Monti, quien ingresó en el complemento, le cometió una infracción dentro del área a Mauricio Asenjo y Herrera no dudó en cobrar penal. Jesús Dátolo, con mucha categoría, marcó el 2-1. Fue la última del partido.