Ante nuevos brotes de Covid-19, en Italia temen que el turismo provoque un desastre

Ante los nuevos brotes de Covid-19 que han ido surgiendo en las últimas semanas en distintas ciudades, el gobierno italiano anunció que pondrá en marcha un plan de contingencia que prevé un fuerte control de las personas que llegan al país como aquellos que lo abandonan. 

El dato del aumento de casos generó alarma en las últimas horas por el contagio inesperado de los novicios y frailes del convento de San Francisco en Asis. Veinticinco de ellos han sido contagiados.  

El objetivo que se persigue con este control es reducir lo máximo que se pueda el nivel de contagio. Según prevén, en las próximas jornadas Italia recibirá una ola de infestados ya que muchos ciudadanos italianos se encuentran de vacaciones en otros países que están pasando momentos críticos por la pandemia. 

A esto se suma lo que ocurrirá dentro del país por una serie de festejos que tendrán lugar este sábado. Se trata del Ferragosto, una antigua fiesta romana de la época de Augusto, del pan y circo que anunciaba el fin de los grandes calores.

Así, se prevé que haya una gran actividad y que las cifras de contagios se incrementen. Concretamente, el gobierno apunta a dar con quienes llegan de países como Grecia, España, Croacia, Malta y Francia, todos países ahora de alto riesgo por el número creciente de contagios de coronavirus. La tarea será difícil ya que son varias las vías de traslado: trenes, aviones, autos y hasta barcos. 

Internamente quiere reducir el accionar de adolescentes y adultos jóvenes ( y no tanto), transgresores de la movida en las ciudades y balnearios.

Para ello se dispondrá una gran movilización de policías, carabineros, agentes municipales que afrontarán la situación y aplicarán cuantiosas multas y cierres de locales a granel en el caso de que observen irregularidades. 

 

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