Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Información General |Ejercicios para entrenar la mente y mantenerla bien activa

La memoria, la teoría de los tres cajones y el orden de los recuerdos para recuperarlos

Expertos proponen una serie de actividades destinadas a desarrollar las capacidades cognitivas y agilizar el acceso a la información

La memoria, la teoría de los tres cajones y el orden de los recuerdos para recuperarlos

Dos personas juegan al ajedrez en un centro de gimnasia mental en Madrid / Liceum Gimnasios de la Mente - Dos personas juegan al ajedrez en un centro de gimnasia mental en Madrid / Foto: Liceum Gimnasios de la Mente

Daniel Galilea

24 de Enero de 2021 | 04:42
Edición impresa

¿Sabía que tenemos distintos tipos de memoria y que para sacar todo el potencial de cada una de ellas es importante cuidarlas mediante ejercicios y recordando diferentes sucesos?

“Así ‘obligamos’ a trabajar a nuestras memorias, desechando la información que no nos interesa y dando paso a ‘guardar’ aquella que realmente es importante para nosotros”, señala el docente, pianista y musicólogo Pedro López, fundador y director ejecutivo (CEO) de Liceum Gimnasios de la Mente (https://liceumgm.com).

Su empresa cuenta con un equipo de profesionales en neurología, pedagogía y psicología, que diseñan y ofrecen una serie de actividades para distintas edades destinadas a desarrollar nuestras capacidades cognitivas, creatividad e inteligencias múltiples, en lo que se conoce como gimnasia mental o ejercicio intelectual.

Uno de sus lanzamientos más novedosos es el canal Mente en forma (https://menteenforma.es), un servicio de gimnasia mental accesible a través de ‘apps’ como WhatsApp o Telegram.

LOS TRES CAJONES DE LA RETENTIVA

Según López, un buen paralelismo para entender cómo funciona nuestra memoria es imaginarla como un gran armario en el que cada cajón guarda una información distinta: la memoria trabajo u operativa, la memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo.

“Resulta clave mantener ordenado y activo cada uno de esos cajones para que, cuando necesitemos una información determinada, ésta se encuentre disponible y sea accesible rápidamente”, asegura.

“La memoria es un proceso complejo. Simplificándolo, podríamos decir que para que un recuerdo se guarde en uno de estos tres cajones, en primer lugar hace falta poder prestar atención a los estímulos del medio que nos llegan principalmente a través de nuestros sentidos”, señala López. “Aunque los estímulos también pueden venir de nuestra imaginación, por ejemplo cuando alguien crea una melodía y la tararea para sí”, añade.

“Una vez que prestamos atención a un estímulo nuestra memoria comienza a trabajar sobre ese estímulo. En este caso, estamos hablando del primer cajón, el de la memoria de trabajo”, explica.

Señala que en este punto la huella del recuerdo es muy fina y hace falta elaborar y trabajar sobre ella para que el recuerdo pueda pasar al segundo cajón, nuestra memoria a corto plazo.

“Si la persona dedica más tiempo a este recuerdo y accede a éste en varias ocasiones, el recuerdo se fortalecerá. También ayuda a fortalecerlo el que le demos un significado, le asignemos una historia, o que usemos una herramienta muy potente para la memoria, como es la emoción”, asegura.

“Si la información entrante recibe la suficiente atención y se ve fortalecida por la emoción (carga emotiva), la recuperación (recuerdo) y el significado (historia), entonces estará lista para pasar al gran cajón que es la memoria a largo plazo”, destaca.

López explica qué tipo de información se almacena en cada uno de los cajones de la memoria y como mantenerlos activo entrenándolos con la gimnasia mental más adecuada.

MEMORIA DE TRABAJO

En este ‘cajón’, que es la puerta de entrada a las memorias más duraderas y está presente en las actividades diarias, encontramos la información en su estado puro, esperando a ser descartada o pasar al cajón de la memoria a corto plazo, según López.

Señala que es la memoria que utilizamos cuando repetimos mentalmente la contraseña de la wifi que nos dan en una cafetería antes de introducirla en el teléfono.

“Es muy frágil, por lo que si nos interrumpen a mitad de esta tarea perderíamos parte o el total de la información. Si nuestro acompañante nos pide la azúcar puede que tengamos que volver a preguntar la clave”, asegura.

Para entrenarla, López recomienda preparar recetas de cocina elaboradas, como “ese estofado de la familia” que ha pasado de generación en generación y para el cual debemos tener accesibles los ingredientes y el orden en el que debemos añadirlo para conseguir que nos quede bien la receta”.

“Para esta receta necesitamos mantener en nuestra mente los pasos que dimos y los que nos quedan para finalizar”, recalca.

Otra forma de ejercitar esta memoria “es conversar con personas con las que no hablamos habitualmente, lo que nos obliga a mantener la atención para ir siguiendo adecuadamente la conversación, reteniendo todo lo dicho”, según este experto.

MEMORIA A CORTO PLAZO

Aquí se guarda la información que almacenamos recientemente, como los eventos que ocurrieron hace unas horas. Un ejemplo sería recordar las actividades realizadas el día anterior o cuánto nos costó una prenda que compramos esta semana, según López.

“Esta memoria dura un poco más que la anterior y actúa de filtro, ya que parte de la información que guarda se mantendrá al cabo del tiempo, pero otra se perderá. No podemos retener toda la información de lo que ocurre a nuestro alrededor. Nuestro cerebro necesita olvidar aquello que no sea importante”, asegura.

Para entrenarla, López aconseja intentar responder a estas preguntas del día a día: ¿Qué comí ayer? ¿Qué ropa me puse el pasado lunes para salir a la calle? ¿Cuál es el último libro que leí? ¿Qué hice el fin de semana pasado? ¿Qué cené el pasado miércoles? ¿Cuál fue la última película que vi en el cine? ¿Cuál fue el último mar/océano en el que me bañé?

MEMORIA A LARGO PLAZO

Es la memoria consolidada y que nuestro cerebro “considera” lo suficientemente importante como para que perdure en el tiempo. En ella guardamos información general y de nuestra historia de vida, según el CEO de Liceum.

Según López, se trata de un gran cajón, en el que se guardará durante un periodo de días, meses, años o décadas.

“Allí es más probable que se guarden aquellas informaciones que son útiles para obtener una recompensa o nos permiten evitar algo desagradable. Es la memoria que nos recuerda llevar las llaves al salir de casa, tras la experiencia de haberlas olvidado dentro y tener que pagar una factura al cerrajero para que nos abriera la puerta, por ejemplo”, señala López.

Para entrenarla, el experto sugiere ejercitar esta memoria recordando fechas importantes para cada uno de nosotros, como cumpleaños de seres queridos o aniversarios.

“Otra forma de reforzarla consiste en tratar de tener accesibles en nuestra mente los nombres de personas importantes, preguntándose: ¿Soy capaz de nombrar diez actores o actrices de la actualidad?, o ¿puedo dar el nombre y apellidos de diez escritores que me gusten?

ENTRENANDO CON LOS NOMBRES

López comparte un ejercicio de gimnasia mental para ayuda a retener la información en el instante en que la recibimos.

“Una situación que nos suele causar conflicto es cuando nos presentan a una persona y descubrimos, minutos después, que no recordamos su nombre. Este un buen momento para entrenar nuestra memoria”, señala.

“Cuando estamos en una presentación, necesitamos tomarnos unos segundos para prestar atención al nombre de la persona que nos presentan. Algunos recursos útiles en ese instante son repetir su nombre en la conversación, imaginarlo de forma escrita y hacer preguntas de tipo “¿tu nombre lleva h?”, sugiere López.

“Otro consejo práctico es utilizar el nombre de la persona en los primeros minutos de conversación (“tienes razón Carlos…”, “estoy de acuerdo Marta…”), con lo que nuestra mente confirma que la información es correcta y efectúa una recuperación exitosa de la información, lo cual potencia la memoria”, concluye.

Cuando prestamos atención a un estímulo la memoria comienza a trabajar sobre éste

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

Multimedia

Dos personas juegan al ajedrez en un centro de gimnasia mental en Madrid / Liceum Gimnasios de la Mente - Dos personas juegan al ajedrez en un centro de gimnasia mental en Madrid / Foto: Liceum Gimnasios de la Mente

Los juegos de mesa son grandes aliados / Liceum Gimnasios de la Mente - Muchas actividades para entrenar la retentiva son de carácter lúdico / Foto: Liceum Gimnasios de la Mente

Los juegos de mesa son grandes aliados del desarrollo intelectual y la memoria / Foto: Liceum Gimnasios de la Mente

+ Comentarios

Para comentar suscribite haciendo click aquí

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$120/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2250

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$160/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3450

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$120.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $2250.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla