En el Bosque, un abrazo entre la ciencia y el arte

La construcción del Observatorio platense surgió como consecuencia de un decreto del gobernador Dardo Rocha, que determinó que el Departamento de Ingenieros haría los planos y determinaría el presupuesto para más de veinte edificios públicos de la nueva ciudad.

Su construcción se inició en noviembre de 1883, un año luego de que el Observatorio Astronómico de París enviara instrumentos astronómicos a la ciudad de Bragado, Buenos Aires, para observar el tránsito de Venus por delante del Sol. Estos instrumentos fueron comprados por la Provincia de Buenos Aires para observar el evento.

El primer director fue Francisco Beuf (teniente de la Armada de Francia y director del Observatorio Naval de Tolón).

LOGROS

Algunos de los logros obtenidos por el Observatorio platense fueron el descubrimiento del cometa C/1913 Y1 (Delavan) y de la estrella Nova Puppis. Realizó además una gran labor astrométrica y sigue registrando datos meteorológicos y de variación de latitudes a lo largo de los años.

Está emplazado en el Paseo del Bosque de La Plata, en donde los fundadores decidieron además instalar numerosas fuentes y esculturas.

Esculturas y fuentes cobraron relevancia dentro del Paseo del Bosque

En el libro “La Plata Ciudad Milagros” dice Sara A. Canestri de Alvarez Gélves -en su artículo titulado “Mi ciudad, mis esculturas”- que “para la ejecución de estatuas y ornamentos de nuestros edificios se contrató al profesor Pietro Costa, en Florencia, en 1882. Y posteriormente Augusto Ballerini adquirió en representación del Dr. Rocha, algunas obras de arte, en la ducal de Venecia”.

“Fue contratado también -sigue diciendo- Víctor de Pol, cuya fama había trascendido a pesar de sus 20 años. Todo esto respondió a la idea del Dr. Rocha de dotar de calidad artística a la reciente capital. Son las esculturas que aún podemos admirar en nuestros espacios verdes”. Muchas de las esculturas platenses respondieron también a los dictados estéticos de Antonio Cánova.

GRANDES CONSTRUCCIONES

Junto a esculturas, fuentes y ornamentos, los fundadores dispusieron que en el Bosque también se erigieran el Museo de Ciencias Naturales, el Jardín Zoológico y el Botánico, y en el límite del paseo grandes facultades como las de Medicina, Agronomía y Veterinaria, así como la de Ingeniería recostada junto al Colegio Nacional.