Britney rompió el silencio: “Solo quiero mi vida de vuelta, ya fue suficiente”

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Al parecer, Britney Spears quiere liberarse desde mucho antes de que sus fans comenzaran a moverse para pedir el final de la curatela que controla su padre: la diva se mostró opuesta a que su padre continuara como su tutor legal en 2014, citando sus problemas con el alcohol y un control excesivo, según una exclusiva publicada por The New York Times.

Según el medio, en 2014, el abogado de Spears, Samuel Ingham, afirmó que la artista tenía miedo a su padre y quería sacarlo completamente de la tutela.

Dos años más tarde, otro informe indicó que la cantante sentía que la tutela se había convertido “en una herramienta opresiva y controladora en su contra” y que, según palabras de Spears, el sistema tenía “demasiado, demasiado control”.

“Está harta de que se aprovechen de ella”, escribió el investigador, cuya identidad no se desvela en el artículo. La estrella del pop expresó entonces que ella trabajaba y ganaba su dinero pero “todos los que la rodean están en su nómina”. De hecho, por ese motivo Britney dejó de cantar en vivo, para evitar seguir enriqueciendo a su padre a cuesta suya.

Entre las revelaciones publicadas por The New York Times, llama la atención que Spears solo recibiera una paga semanal de 2.000 dólares cuando protagonizada un espectáculo fijo en Las Vegas que vendía millones en entradas. Su fortuna actual se estima en 60 millones de dólares.

El diario asegura que el control de su padre, Jamie Spears, es tal que incluso prohibió que renovara su cocina porque era demasiado cara.

HARTAZGO

Las revelaciones se dieron horas antes de que la artista interviniera en un juzgado de Los Ángeles que decidirá el futuro de esta figura legal que controla todas las decisiones de su vida desde hace 13 años, para pedir el fin de la tutela.

“Mi papá y todos los involucrados en esta custodia, incluida mi manager, ... deberían estar en prisión”, aseguró Spears, y amenazó con demandar a su familia. Britney contó que levanta la voz ahora porque “antes creía que nadie me iba a creer. Creía que la gente se burlaría de mí. Pero ahora quiero mi vida de vuelta. Ya ha sido suficiente”.

En documentos judiciales recientes, Spears ha buscado tener más voz sobre quién dirige la tutela y ha pedido que se retire a su padre, que tuvo un gran poder sobre su vida y su dinero durante la mayor parte de su existencia.

La jueza, sin embargo, se negó hasta ahora a destituir a James Spears por completo, aunque éste ahora desempeña un papel menor como conservador de sus finanzas junto a la firma de administración de patrimonio Bessemer Trust, y en 2019 renunció a su rol de curador sobre las decisiones de vida de su hija a un profesional designado por el tribunal.

La cantante nunca le ha pedido a la corte que ponga fin a la tutela por completo, aunque ha enfatizado en documentos que se reserva el derecho de hacerlo en cualquier momento.

 

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