La señalización vial debe estar visible y no ser confusa o contradictoria

Estrechamente relacionada a la seguridad y también a la funcionalidad del tránsito automotor, la señalización vial debe formar parte del sistema de prevención que ordene el movimiento vehicular en rutas, calles y autopistas. En este sentido, los especialistas no dejan de aludir al hecho comprobado de que la vida e integridad física de quienes transitan dichas vías camineras dependen de la claridad del mensaje que las señales transmiten y, desde luego, de la atención y acatamiento que los automovilistas y peatones le presten.

Ocurre también que, en muchas ocasiones, la falta de señalización adecuada –por ejemplo, cuando se realizan obras de reparación en rutas o calles- puede provocar, y de hecho así ocurre en numerosas oportunidades, accidentes muy serios.

Así lo hicieron conocer en las últimas horas vecinos de Villa del Plata y de Punta Lara que reclamaron por la precariedad de algunas señales que se colocan en las obras de repavimentación que se realizan en la diagonal 74, que une a nuestra ciudad con aquellas localidades de Ensenada. La falta de una buena señalización ya provocó varios accidentes y en uno de ellos perdió la vida un joven, dijeron.

“La zona no estaba iluminada adecuadamente, no había carteles y los tachos que se colocan para marcar la zona de obra carecían de cintas refractarias”, dijo una de las vecinas que protestó.

Los vecinos calificaron la situación de “insostenible” y añadieron que ni siquiera pueden saber qué empresa está a cargo de los trabajos, de modo que por esa razón también se les torna problemático l saber si hay que reclamar a Vialidad o al municipio de Ensenada.

Otros vecinos consignaron que para peor a las 18 ya es de noche y suele ser un lugar dónde los bancos de niebla dificultan la visibilidad. En ese marco, se destacó que dejar una mala señalización en la cinta asfáltica les hace temer que se repitan situaciones trágicas o muy graves.

Los especialistas no dejan de poner su acento en el hecho de que la señalización vial existe para organizar y brindar seguridad en las distintas vías camineras, no para añadir confusión. Se sabe que el fenómeno del tránsito resulta ser multidisciplinario, ya que para que exista seguridad deben conjugarse la disciplina y educación de los conductores con la calidad mecánica de los vehículos, el estado de los caminos y la disponibilidad de una señalización vial en perfectas condiciones, entre otros factores.

Además, sostienen que el llamado lenguaje vial responde a la necesidad de guiar con certeza tanto a los transeúntes como a los conductores de vehículos, procurándose prevenir y evitar con las llamadas señalizaciones verticales u horizontales cualquier tipo de tragedia o de accidente.

Sin dejar de señalar que la indisciplina de muchos conductores existe y que debe ser fiscalizada y, en su caso, sancionada, resulta necesario que las administraciones se ocupen de mantener en debida forma las estructuras viales, acompañándolas con señalizaciones atinadas, colocadas para ordenar el flujo vehicular.

Es imperativo que desde los distintos organismos administrativos responsables se garantice la instalación de las demarcaciones, allí donde hagan falta, y se evite la peligrosa presencia de señalizaciones confusas o contradictorias.