El delito se abre paso en un nuevo barrio de la zona sur de la Ciudad
Edición Impresa | 13 de Febrero de 2022 | 05:14

“Nuevo Lorenzo”. Así denominaron a un sector del barrio Altos de San Lorenzo, que antes era descampado y ahora muestra un crecimiento importante en cuanto a cantidad de obras particulares.
Sin embargo, la urbanización de esas manzanas en la zona sur de la Ciudad, no solo trajo progreso. También al delito.
De acuerdo a los vecinos, muchos todavía en plena etapa de construcción de sus viviendas, en pocos días se robaron al menos cuatro portones de hierro.
Son estructuras que valen mucho dinero y que seguramente sus dueños han hecho un gran esfuerzo para poder adquirir.
Por si fuera poco, a plena luz del día, pululan algunas bandas que amenazan a los trabajadores, lo que ha provocado mucho temor.
El nuevo barrio está delimitado por las calles 23 bis a 25 y de 76 a 80.
De arterias amplias con ramblas, luminarias y una reciente forestación, los vecinos de “Nuevo Lorenzo” apostaban a tener un lugar donde vivir en paz. Pero los últimos acontecimientos los han hecho encender las luces de alerta.
“Los robos ocurren de noche, cuando también marcan las obras. Acá no hay seguridad policial y, si bien las denuncias están, los resultados no”, expresó un frentista, que prefirió no identificarse para evitar represalias.
“Creemos que son bandas organizadas, que necesariamente tienen que contar con una camioneta o un camión para poder cargar los portones. Eso no te lo robás así nomás”, añadió.
PICADAS DE MOTOS
Otro problema grave en el barrio “Nuevo Lorenzo”, es el de las picadas de motos.
Precisamente, aprovechando las características de la zona, grupos de jóvenes utilizan las calles recién pavimentadas para acelerar a fondo y hacer pasadas a todo lo que da con los caños de escape liberados.
“Por los cortes, el ruido que meten es ensordecedor y le hemos pedido que no corran, que es peligroso, pero se nos ríen en la cara”, relató la misma fuente, que aclaró que ya han pedido lomos de burro a la Municipalidad de La Plata, pero sin resultados.
“Ya no sabemos que más hacer. Estábamos contentos, en un lugar que mostraba un crecimiento importante, que se estaba poniendo lindo y empezaron los dramas”, expresó la mujer.
“Es hora de que las autoridades tomen cartas en el asunto. Nos hemos instalado en la zona con muchísimo esfuerzo y muchas ilusiones. Nosotros no molestamos a nadie, solo queremos vivir en paz ”, señaló.
Por jurisdicción, cabe destacar, esas manzanas corresponden a la comisaría octava, aunque los patrullajes preventivos están a cargo del Comando La Plata.
MÁS INSEGURIDAD
Vecinos del barrio La Josefa, en tanto, que está localizado en el límite de las localidades de Gonnet, Ringuelet y Hernández, están cansados de los reiterados episodios de inseguridad.
Eso fue lo que sucedió en la zona de 23 y 511, donde un hombre fue abordado por dos delincuentes en un par de motocicletas, quienes se pusieron en su camino, le impidieron el paso y lo amenazaron para que les entregara todos los elementos de valor que llevaba encima.
Al encontrarse completamente solo y, sin que nadie pudiera ayudarla, la víctima no tuvo más alternativa que ceder a las pretensiones delictivas. Así vio cómo los ladrones fugaban con todas sus pertenencias.
A causa de esta situación, que parece fuera de control, algunos frentistas comenzaron a expresarse en los distintos grupos de las redes sociales y no descartan una medida radical: cortar la avenida 25 para visibilizar la bronca que sienten por la falta de seguridad.
“Algo debemos hacer. Es a lo único que le dan bolilla. Vienen y al menos preguntan qué nos pasa. Tienen que poner la cara. De lo contrario, no vemos un policía ni en figuritas”, fue uno de los mensajes de las últimas horas.
Días atrás, agentes policiales realizaron un allanamiento donde hubo detenidos y secuestraron elementos de dudosa procedencia. Sin embargo, en menos de una semana, los sospechosos recuperaron la libertad y siguen al acecho.
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