Faldas y minis: tendencias que no fallan

Impuesta en la década del sesenta, la minifalda es un complemento fácil de combinar para infinidad de ocasiones. Desde un encuentro profesional, presentaciones importantes o simplemente para ir a pasear, su uso no se limita solo al verano, sino que se puede recurrir a ella también en invierno, acompañada de medias largas o enteras.

Nació a principios del siglo XX y pasó por varias modificaciones hasta la llegada a la actualidad, con un largo camino que debieron transitar las mujeres. En los años 20, lejos estaba el género femenino de poder elegir con qué o cómo vestirse, al contrario, todo era hermetismo y vestidos largos desde el cuello hasta los tobillos.

Fue un elemento de lucha y un símbolo de revolución que se replicó en las principales figuras y referentes del mundo. Hoy, es un canal para el arte y la expresión de diseñadores inspirados en volver a darle una nueva vida y utilidad, como ha ocurrido en el pasado.

Estampadas o lisas, las polleras juegan un papel importante en cada look

No es una casualidad o un dato para ignorar el tipo de prendas con las que las mujeres solían salir a la calle o un evento social. Tampoco lo es la importancia de la minifalda entre las prendas -hoy- preferidas de ambos géneros.

Su versatilidad para combinar formas, colores, tipos, diseños y tamaños también regala un abanico de posibilidades en escenarios donde puede ser la protagonista.

La historia habla por sí sola. De a poco, tras la culminación de la Segunda Guerra Mundial, todo cambió. Ya en la década del sesenta, las prendas conservadoras dejaron de tener un rol protagónico para que se avecine un cambio de óptica.

Pollera con botones / Web

La tendencia de este año trajo nuevos y fantásticos diseños, entre los que se impuso la pollera tableada. La minifalda en un solo color, con una línea en la parte inferior que rodea toda la tela o bien, escocesa, con cadenas en los costados. Las presentaciones varían y ayudan a elegir sin limitarse a los modelos clásicos.

Para las más osadas, las micro-minifaldas pueden ser una buena elección. Famosas como Hailey Bieber, Emrata o Chiara Ferragni las lucen en las alfombras rojas del mundo con un estilo único y personal, que es replicado por sus seguidoras y, también, seguidores.

El cuero o ecocuero es una tela perfecta para las polleras de este tipo. De color negro, en su mayoría, y adaptada a los cuerpos, van perfecto con un suéter a cuadros o estampados ya que debajo solo habrá un color oscuro, simple de combinar.

Debajo del suéter, en caso de que sea verano, con una remera básica o camisa clara, botas de caña corta y unos aros estás lista para salir a la calle. Las camperitas de jean son otro gran aliado en cuestiones de combinar prendas.

La minifaldas con botones son otra presentación a la que se puede recurrir y combinar con más prendas para cualquier ocasión. Un saco o tapado negro bastará para concluir la elección de ropa junto a unas zapatillas o sandalias de un solo color.

El corderoy nunca falta en las telas más comunes para las nuevas tendencias. Años atrás era normal verlos en tapados o sacos cubriendo el jean. Para las minifaldas, este material en un tono marrón, beige o nude, hacen una excelente pareja.

LLEGAN LOS ESTAMPADOS

Al igual que ocurrió este año con los tapados, el estampado escocés parece haber llegado para quedarse por un largo tiempo. Así es que las polleras cortas, como se la vio lucir a Becky G, con este diseño se llevan bien con botas largas, de caña media y oscuras.

El amarillo y negro, azul con amarillo, rojo con negro y gris con negro son algunas de las combinaciones que más salieron este 2022 para crear accesorios hermosos.

En este punto, es un gran momento para experimentar con texturas ya que en la moda nada está escrito y cada persona lo adapta a su gusto y placer. Así, por qué no, se puede recurrir a una minifalda escocesa con botas de cuero y una campera puffer a tono.

LOS HOMBRES TAMBIÉN

El género masculino ha sabido abordar la moda en sus términos y adaptarla a sus looks. Hace no mucho, Brad Pitt dejó perplejo al mundo con su adaptación en la alfombra roja. A los 58 años y siendo uno de los más deseados de Hollywood, puede ponerse lo que quiera.

Pero mucho antes, los ídolos del ámbito musical ya habían incursionado y hasta marcado un camino en esta aventura de las polleras para los hombres. Uno de los primeros -en casi todo lo que hizo- fue David Bowie.

David Bowie marcando tendencia / Web

Con una falda larga hasta el suelo combinada con la parte de arriba, creando un vestido con escote, el cantautor fallecido en 2016 fue copiado por quienes lo siguieron y se hicieron famosos al igual que él, como Axl Rose.

El vocalista de Guns N’ Roses solía sorprender a su público con las polleras más buscadas después de cada concierto. Acompañado con su clásico pelo al viento, sostenido en general por una vincha, una remera rasgada y unos borcegos, ¡hasta las mujeres lo copiaron!

En la línea de tiempo, quien continuó este legado supo ser Kurt Cobain, un referente de la Generación X, en la década del noventa. El cantante de Nirvana logró captar la atención del mundo con sus fantásticos looks arriesgados y de los que poco le importaban lo que opinen los demás.

En los últimos años, la moda de las prendas sin género fue sumando adeptos. De esta manera, desde Bad Bunny hasta Harry Styles pasando por diseñadores de moda y empresarios, cada vez más hombres recurren a las polleras en todos sus estilos.

Los famosos marcaron un antes y un después al utilizarlas ante el mundo

Sin embargo, no hay que pasar por alto que todos los mencionados anteriormente son hombres famosos, poderosos y deseados. Precisamente ellos son los personajes ideales para llevar adelante la idea de romper con los estereotipos y que todos usen las prendas que les quedan cómodas, como premisa principal.

Por otro lado, al ser fáciles de combinar con botas de caña corta, media y larga; borcegos de distintos colores; zapatillas y hasta sandalias, las minifaldas y polleras cortas son un tipo de prenda que los fanáticos de la moda deben tener entre sus favoritos.

Sin contar que es una excelente estrategia para captar la atención de todos al entrar a un lugar. Da un espacio para que el género masculino se arriesgue e investigue lo que ocurre más allá de los clásicos pantalones de vestir o jeans.

Si, es cierto, no es una novedad que los hombres utilicen polleras pero sí sigue siendo una sorpresa para quienes se topen con esta tendencia. Por ello es que el hecho de que desde David Bowie, pasando por Kurt Cobain hasta llegar a Harry Styles o Bad Bunny, elijan estas prendas en distintas ocasiones marca un precedente.

No importa qué se ponga o cómo lo combinan, lo importante es estar cómodos, livianos y seguros de lo que se hace. En la moda, como se mencionó, no hay reglas y cada uno lo adapta a sus posibilidades pero esto no es un impedimento para ser original.

Brad Pitt supo utilizarlas / AP