Un festejo agridulce: ¿se despide de los derechos de Mickey?

Es conocida, y real, la historia de cómo Disney protegió sus derechos sobre el Ratón Mickey forzando cambios en las leyes de copyright en Estados Unidos. De hecho, allí la ley de extensión de los derechos de autor se conoce como “la Ley de Protección de Mickey Mouse”. La legislación dicta la cantidad de años que tienen que transcurrir tras el estreno de una pieza para que ese producto sea parte del dominio público (es decir, se pueda usar libremente). Pero cada vez que la fecha de expiración se acercó, Disney hizo lobby para seguir controlando a su ratón fundacional.

Pero según la última extensión, en 2024 Mickey cumplirá 96 años y según la ley de derechos de autor de Estados Unidos pasará a dominio público tras la expiración de los mismos.

Pero no es el fin. Según dicen los especialistas, el uso de Mickey no es ilegal siempre que cuando una persona recrea a Mickey Mouse lo haga de tal manera que el público no lo relacione con Disney. ¿Pero cómo no relacionarlo? La empresa ya prepara a su ejército de abogados para que, en todo caso, pueda decir ante un uso indebido del ratón que viola su marca registrada, la de Disney. Y según algunos, ya hay movimientos para intentar extender una vez más los derechos.

Mickey Mouse no es el primer personaje de Disney en independizarse de la compañía, aunque sí el más importante. En 2022 Disney ya ha tenido que empezar a despedirse de algunos de sus personajes icónicos como Winnie the Pooh. El oso amante de la miel y la mayoría de sus amigos del bosque de los Cien Acres pasaron a ser de dominio público a principios de año. Y con ello fueron muchos los que tomaron la imagen de Winnie the Pooh para distintos proyectos.

El primero en hacerlo fue Ryan Reynolds. El actor hizo un guiño al oso en un anuncio donde leía un libro para niños titulado ‘Winnie the Screwed’. Pero sin duda la versión más inquietante fue “Winnie the Pooh: Blood and Honey”, una película de terror clase B donde el oso, Piglet, Tigger, Ígor y el resto de pesonajes se convierten en asesinos en serie para perseguir a los humanos tras haber sido abandonados por su viejo amigo, Christopher Robin.