En La Plata no se salva nadie: roban en la casa de un ex juez de Casación

En una cuadra de La Loma, la inseguridad viene generando muchísimo temor, porque en solo un mes ya se registraron tres robos. El último caso, que ocurrió el domingo pasado, tuvo como víctima a un ex juez del Tribunal de Casación Penal bonaerense, según indicaron a este diario calificados voceros policiales.

El hecho se registró en la calle 43 entre 20 y 21 y se sospecha que no tuvo ningún tipo de connotación especial. Es decir, habría sido al voleo.

“En el último mes ya robaron en tres casas, siempre un domingo o un sábado y coincidiendo con que los dueños no estaban”, reveló Nora Moyano (68), la esposa de Benjamín Sal Llargués, el ex magistrado.

Por eso, la mujer conjeturó: “Los ladrones tienen en la mira al barrio” y acotó que “seguramente nos vieron salir con mi marido, lo mismo cuando, un rato más tarde, lo hizo mi hijo”.

Según narró Moyano, “la casa estuvo sin ninguno de nosotros durante cuatro horas, porque nos fuimos a las 12 del mediodía, para ir a almorzar a la casa de unos familiares en City Bell, y regresamos a las 4 de la tarde”.

”Se ve que habrán advertido cuando nos retiramos y, como ya lo hicieron en otras dos viviendas de la cuadra, se metieron a robar en la nuestra”, agregó.

De acuerdo a lo que pudieron comprobar al amargo regreso a su domicilio, los autores del golpe “primero violentaron la puerta de reja del frente y luego barretearon una segunda puerta, que comunica con el interior de casa”.

Con respecto al panorama con que se enfrentaron al recorrer los diversos ambientes de su hogar, Moyano señaló que “fundamentalmente revolvieron y desordenaron todo en el dormitorio principal”.

Consultada sobre lo sustraído, respondió que “se llevaron dos relojes míos, un televisor, un arma de fuego que teníamos declarada y pasaportes vencidos”.

Al mismo tiempo, sostuvo que “por el enorme desorden que provocaron, se nota que habrán buscado dinero, pero acá nunca dejamos nada”.

Lamentó después que “tenemos una perra de 3 años, cruza con boxer, que es sumamente guardiana y lo demuestra cuando ve a desconocidos. Pero justo la dejamos encerrada en un ambiente distinto al que entraron los delincuentes, entonces pudieron evitarla. Aunque les habrá ladrado desde que entraron hasta que se fueron”.

En otro pasaje de la charla con este diario, Moyano dio a conocer que “la situación con la inseguridad acá es muy preocupante, porque en el último mes van tres casas en las que robaron”.

Con el temor instalado entre los frentistas de la cuadra, se consensuaron los pasos a seguir para intentar revertir ese estado de cosas.

”Vamos a reunirnos el próximo sábado con vecinos del barrio, probablemente a la tarde, para ver la posibilidad de hacer instalar el sistema de la alarma grupal”, anticipó.

Asimismo, confió que “en más de una oportunidad, inclusive hablamos en familia de poner una alarma en casa. Es una opción que no me gustaba, pero ahora cambié de idea”.

”Lo que pasa es que hace más de 30 años que vivimos acá y nunca habíamos sufrido un robo. Una creía que era un barrio seguro, pero lo ocurrido me hizo ver el tema de otra manera”, admitió Moyano.

Insistió en subrayar que “nos sentimos vigilados en la cuadra, pese a que algunos vecinos tienen cámaras propias de seguridad”.

Al preguntársele si alguna de ellas filmaron a los delincuentes, refirió que “sí, pero no se los ve con nitidez. Más que nada se observa que estaban en un auto negro”.

La mujer agradeció que “por suerte no estaba mi hijo, que tiene 40 años y de haber descubierto a los delincuentes, hubiera reaccionado”.

La denuncia de lo ocurrido quedó radicada en la comisaría cuarta.

UNA SALIDA CONTROVERTIDA

Cabe recordar que el ex juez de Casación Benjamín Sal Llargués fue autor, junto a su par Horacio Piombo, en el año 2015, de un controvertido fallo, que generó una fuerte repercusión mediática.

Fue a partir de su decisión, compartida con Piombo, de haberle reducido la pena a un condenado por abuso de un menor por considerar que el hecho no había sido “gravemente ultrajante”.

A poco de ese decisorio, cabe recordar, Sal Llargués presentó su renuncia a la Cámara de Casación Penal provincial, a través de una carta dirigida al entonces presidente de la Suprema Corte bonaerense, Juan Carlos Hitters.