La delincuencia, al acecho en La Plata: lo esperaron, lo asaltaron y escaparon

La inseguridad que castiga a la población de La Plata se presenta en lugares y horarios inesperados, quizá como una estrategia para desconcertar a sus víctimas.

Esta inquietante realidad fue también padecida, en la mañana de ayer, por un hombre de 36 años, quien reside en un edificio en las cercanías del Registro Provincial de las Personas (1 y 60).

Según lo que en la tarde de ayer le contó a EL DIA el damnificado, que sólo pidió ser identificado como Sebastián, el atraco se produjo cuando llegó a la puerta del edificio donde se domicilia, en 4 entre 59 y 60, y se disponía a ingresar.

Pero antes que pudiera colocar la llave en la cerradura, fue rodeado por dos jóvenes desconocidos.

En tal sentido, la víctima informó que “fue a las 10 y media de la mañana (de ayer), cuando ambos ladrones, que demostraban tener unos 25 años, se me acercaron y me pidieron que les diera todo lo de valor que tenía encima”.

Al respecto, aseguró que “me sustrajeron 5.000 pesos y el celular, que lo tenía guardado en un bolsillo”.

Sin embargo, una calificada fuente policial sostuvo ante este diario que al damnificado “lo despojaron de 25.000 pesos, de una bolsa en la que guardaba dos celulares con sistema de rastreo, uno suyo y otro de su lugar de trabajo, de una chequera del Banco Credicoop y de boletas de cobro”.

“LO ESTABAN ESPERANDO”

El mismo vocero, quien indicó que tuvo acceso a la denuncia radicada en la comisaría novena por el hombre asaltado, aportó luego un dato que tiñe de intriga el accionar de los citados delincuentes.

Sucede que, reveló, “la víctima expuso en su presentación en la seccional que cuando llegó a la cuadra del edificio donde vive, observó a uno de los asaltantes que “estaba parado en un edificio lindante” al que resultó el escenario de este caso de inseguridad.

Asimismo, el oficial de policía ligado a la investigación de este asalto ventiló además que “antes de escapar del lugar, estos dos delincuentes le ordenaron al hombre asaltado que ingrese al edificio y que caminara unos metros”.

Entre atónito y aturdido por el desagradable momento que le tocó atravesar, Sebastián decidió acatar esa exigencia.

Recién cuando observaron al asaltado en la situación antes descripta, ambos hampones decidieron darse a la fuga. “Salieron corriendo”, refirió el vocero policial.

Lo que nadie pudo establecer fehacientemente, es si a quienes huían con el cometido cumplido, los aguardaban en las inmediaciones cómplices en algún vehículo.

De todas maneras, más allá de que poco después de consumado el robo se presentaron en la escena patrulleros y efectivos de la comisaría de la zona (está en 5 y 59), la búsqueda que hicieron mediante rastrillajes no arrojaron los resultados deseados.

En consecuencia, los detectives de esta dependencia policial apuestan ahora a tratar de individualizar a los hampones mediante filmaciones que pudieron captar cámaras de seguridad del edificio.

Igualmente, en base a lo dado a conocer por ocasionales testigos, los investigadores conocen que “uno de los delincuentes es de 1,70 de estatura, de contextura física robusta y vestía un buzo gris y un pantalón del mismo color”.

En cuanto a su compinche, fue descripto como “más delgado, llevaba puesta una bermuda roja y una gorra de color oscuro”.

Cuando este diario le preguntó si en alguna oportunidad había visto a sus asaltantes, respondió sin titubear que “no, jamás en la vida”.

“Hace aproximadamente dos años que vivo acá y es la primera vez que me roban”, reflejó.

Pero, como se menciona más arriba, llamó poderosamente la atención de los investigadores el dato suministrado por la víctima, en relación a que uno de los asaltantes estaba al acecho de que el damnificado llegara al edificio donde reside.

ASEDIADOS POR EL DELITO

Consultas realizadas por este diario en la zona, permitieron conocer que el accionar delictivo allí es frecuente.

Una comerciante, que pidió mantener su identidad en el anonimato, denunció ante EL DIA que “desde hace un tiempo que hay robos seguido en el barrio, especialmente en negocios”.

Y no obvió citar que “y ni hablar de la bandita de menores de edad que delinque sobre calle 1”.

El hombre asaltado indicó que el ataque “fue en un minuto”. Y que los ladrones “tenían barbijos”