Noche de terror por un asalto para una pareja de jubilados en City Bell

Los casos de inseguridad en la zona Norte de la Ciudad se repiten y generan cada vez más temor. Hay mano de obra local y también del Conurbano profundo, que dan los golpes y aprovechan algunas de las vías de acceso para desaparecer sin dejas rastros.

A juzgar por los últimos episodios, City Bell volvió “a estar de moda” entre las preferencias delictivas.

No es una conjetura, sino una situación admitida por algunos voceros y siempre mencionada en la localidad, donde hay temor reverencial.

Más allá de todo, lo que verdaderamente sorprende, es la impunidad con la que se manejan los asaltantes.

ESTABAN EN PLENO DESCANSO

Cabe mencionar que luego de que trascendiera en fuentes oficiales la odisea que atravesó un matrimonio de jubilados en su domicilio que está sobre Camino General Belgrano entre 474 y 475, este diario fue al lugar con el objeto de conocer cómo transcurrió el dramático episodio.

En ese sentido, en el barrio confirmaron a este diario el asalto y contaron que una de las víctimas, de 82 años, radicó la denuncia policial. Estaba junto a su mujer.

Según los voceros, este caso de inseguridad se desarrolló mientras el matrimonio blanco del asalto se encontraba en pleno descanso. Una modalidad que, por otra parte, es bastante recurrente.

AMENAZAS Y PEDIDO DE DÓLARES

Los mismos informantes aseguraron que los delincuentes “eran cuatro” y que portaban armas de fuego.

En el barrio hubo quienes se mostraban convencidos de que esos sujetos consiguieron entrar al domicilio de la pareja “saltando por el frente o por un lateral de la casa.

Desde el portón de entrada, es necesario recorrer más de 30 metros hasta llegar al inmueble, donde dormían los damnificados por el atraco. Y es lo que hicieron quienes consumaron el robo.

A decir de los allegados a la pesquisa, los hampones despertaron, amedrentaron y obligaron a los abuelos a revelarles dónde guardaban sus ahorros. Pero, en particular, se aseguró, “les pedían a cada rato saber dónde tenían escondidos los dólares”

La requisa profunda que encararon los ladrones, pero lo cierto es que, se reveló “les sacaron 800 dólares”.

También “5.000 pesos, electrodomésticos, dos celulares y el auto del matrimonio, un Chevrolet Onix”.

¿FUE AL VOLEO O CON UN DATO?

Los investigadores están abocados no sólo a seguir pistas que conduzcan hacia el paradero de la banda.

Simultáneamente, procuran determinar si los delincuentes eligieron esa vivienda al azar o si sabían que allí viven jubilados, a quienes supuestamente podrían haberle llegado a quitar una cantidad importante de dinero en efectivo. La banda habría esperado otro monto.

Las cámaras de seguridad pasaron a convertirse en la gran esperanza para poder detectar e identificar a los delincuentes.

Al margen de todas las tareas periciales, en cuanto al levantamiento de rastros, por lo general estos casos se resuelven con imágenes de video.

La ciudad está minada de domos que filman y también existen muchos equipos domiciliarios. Por eso los investigadores rastrillan toda la zona con la ilusión de obtener algún indicio.

Las directivas son impartidas desde la UFI Nº 9 de Autores Ignorados del Departamento Judicial local.