Alimentación: no es una dieta, la Mediterránea es una forma de vida

Se caracteriza por el consumo de alimentos frescos, ricos en nutrientes y bajos en grasas saturadas. Es una opción alimentaria efectiva para promover la longevidad y prevenir enfermedades crónicas

Edición Impresa

La dieta mediterránea es una de las más completas y saludables que existen. Se caracteriza por el consumo de alimentos de origen vegetal, como frutas, verduras, legumbres, cereales integrales, frutos secos y semillas, y por el uso del aceite de oliva como principal fuente de grasa. También incluye pescado, marisco, huevos, lácteos y pequeñas cantidades de carne roja y dulces. Además, se acompaña de un consumo moderado de vino y de hierbas aromáticas para sazonar los platos.

Numerosos estudios científicos han demostrado los beneficios de la dieta mediterránea para la salud, especialmente para prevenir y tratar las enfermedades cardiovasculares. Según la MedlinePlus enciclopedia médica, seguir la dieta mediterránea puede llevar a niveles de azúcar en sangre más estables, colesterol y triglicéridos más bajos y a un riesgo menor de desarrollar enfermedades cardíacas y otros problemas de salud.

Uno de los últimos estudios al respecto es el publicado por el New York Times, que analiza los efectos de la dieta mediterránea en la prevención del cáncer y el deterioro cognitivo. El estudio se basa en los datos de más de 25.000 mujeres que participaron en el Women’s Health Study, un ensayo clínico que duró 25 años y que evaluó el impacto de diferentes intervenciones sobre la salud cardiovascular y el cáncer.

 

Las mujeres que la siguieron tuvieron un 25% menos de riesgo de desarrollar cáncer

 

Los resultados del estudio muestran que las mujeres que siguieron una dieta mediterránea tuvieron un 25% menos de riesgo de desarrollar cáncer de mama, ovario o colorrectal que las que siguieron una dieta occidental típica. Además, las mujeres que siguieron una dieta mediterránea tuvieron una mejor función cognitiva y una menor pérdida de memoria que las que no lo hicieron.

Los investigadores atribuyen estos beneficios a la combinación de nutrientes y antioxidantes presentes en los alimentos de la dieta mediterránea, que podrían actuar como protectores frente al daño celular y la inflamación. Asimismo, destacan el papel del aceite de oliva, rico en ácidos grasos monoinsaturados y polifenoles, que podrían mejorar el perfil lipídico y la función endotelial.

 

Ayuda con niveles de azúcar en sangre estables, colesterol y triglicéridos más bajos

 

La dieta mediterránea no solo es buena para la salud física, sino también para la mental. Según la Mayo Clinic, la dieta mediterránea puede ayudar a mejorar el estado de ánimo y a prevenir la depresión. Esto se debe a que algunos alimentos de la dieta mediterránea, como los frutos secos, el pescado y el aceite de oliva, contienen ácidos grasos omega-3, que son esenciales para el funcionamiento del cerebro y el sistema nervioso.

Además, la dieta mediterránea favorece un estilo de vida saludable, que implica hacer ejercicio físico regularmente, mantener un peso adecuado, dormir bien y socializar con otras personas. Todos estos hábitos contribuyen a mejorar la calidad de vida y el bienestar emocional.

La dieta mediterránea es una forma sencilla y sabrosa de cuidar nuestra salud. No se trata de seguir un régimen estricto ni de contar calorías, sino de elegir alimentos naturales y variados que nos aporten todos los nutrientes que necesitamos. Además, podemos adaptarla a nuestros gustos y preferencias personales, sin renunciar al placer de comer.

 

Las 10 reglas fundamentales

1 Cocinar con aceite de oliva.

2 Buscar alimentos poco procesados, frescos y de temporada.

3 Consumir pescado en abundancia y huevos con moderación.

4 Comer pamn integral, pasta y arroz (1 o 2 porciones por comida.

5 Beber agua por excelencia y vino con moderación.

6 Tomer fruta fresca como postre

7 Consumir alimentos de origen vegetal.

8 Consumir diariamente yogurt y quesos

9 Comer carne roja con moderación

10 Realizar actividad física diariamente.

La variedad de vegetales es fundamental / Web

Consejos adicionales

❑.- Comer muchas frutas y verduras. Trate de comer al menos cinco porciones de frutas y verduras por día.

❑.- Ingerir granos enteros en lugar de granos procesados. Los granos enteros son una buena fuente de fibra, que puede ayudar a mantenerte lleno y también puede mejorar tu salud digestiva.

❑.- Elegir fuentes de proteínas magras, como pescado, pollo y frijoles. Las fuentes de proteínas magras son más bajas en grasas saturadas y calorías que la carne roja.

❑.- Limitar el consumo de grasas saturadas, carne roja y alimentos procesados. Las grasas saturadas y los alimentos procesados pueden elevar sus niveles de colesterol y aumentar su riesgo de enfermedad cardíaca.

❑.- Usar aceite de oliva como su principal fuente de grasa. El aceite de oliva es una grasa saludable que puede ayudar a reducir sus niveles de colesterol y proteger su corazón.

❑.- Beber mucha agua. El agua es esencial para una buena salud y puede ayudar a mantenerte hidratado.

❑.- Difrutar de las comidas y meriendas. La dieta mediterránea es una forma deliciosa y satisfactoria de comer.

 

 

dieta mediterránea

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE