Condena de 22 años por un asesinato en Berisso

César Castaño, el acusado, había sido hallado culpable por un jurado popular. El juez del caso le aplicó el agravante de la reincidencia

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Por el crimen de un jubilado en Berisso ocurrido en el año 2016, caso por el que un jurado popular había encontrado culpable al imputado, identificado como César Emanuel Castaño, el juez Ramiro Fernández Lorenzo emitió ayer una sentencia de 22 años de prisión por el delito de “homicidio en ocasión de robo”. Además, para graduar la pena, el magistrado hizo valer una declaración de reincidente.

A fines del mes pasado, luego de varias horas de deliberación, el tribunal lego no llegó a una unanimidad de criterio para dictar la culpabilidad por la acusación de homicidio causal (criminis causa), que había requerido la fiscal de juicio, Helena De La Cruz.

Fue ante un escenario dividido, que el jurado, por mayoría, optó por la figura de homicidio en ocasión de robo.

“Cayó preso unos meses después del homicidio y siguió en esa condición hasta junio de 2019, cuando la Justicia le dio el cese de la medida de coerción. Pero la Cámara revocó la medida y Casación confirmó la revocación”, recordó una fuente ligada al caso.

En ese ínterin que estuvo libre, cometió dos robos con arma, en noviembre de 2019. Ahí fue detenido por las dos causas: la de los robos y la del homicidio previo”, agregó el vocero.

Pasada la audiencia de cesura, donde las partes hicieron fundamentos sobre la figura penal y el monto de la sanción que estimaban corresponder, el juez Fernández Lorenzo determinó una condena de 22 años.

La víctima, Alberto Chamorro, fue ultimada de una cuchillada cuando salió al patio de su casa en Berisso.

El hecho ocurrió el 2 de julio de 2016, en una propiedad de la calle 11 entre 149 y 150.

Allí hubo un forcejeo y la estocada mortal.

Tal como EL DIA reflejó en aquella oportunidad, durante una rueda de reconocimiento que se hizo en la sede de la DDI La Plata, un familiar de la víctima identificó al acusado.

La puñalada a Castaño le ingresó a la altura de una de sus clavículas.

La defensa estuvo a cargo de los abogados Julián Rimada y Martina Rafetto, que pidieron una pena menor, de 10 años.

EL REQUERIMIENTO FISCAL

Tras detallar cada una de las pruebas de cargo, la fiscal De la Cruz recordó que durante el juicio oral hubo testigos que declararon atemorizados.

“El barrio tiene miedo de hablar, no lo denunciaba” a Castaño “por temor”, explicó.

En su alegato le dijo al jurado: “Yo confío en ustedes que van a hacer justicia, ustedes no tienen miedo, confío en que ustedes harán descansar en paz a Alberto y harán dormir tranquilos a todo el barrio”.

 

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