De hojas a “oro verde”, la helada llegó a las verdulerías de La Plata: aumentos en exceso

Tanto productores como comerciantes coincidieron en que los precios de las frutas y verduras subieron de forma exponencial por efecto de la pérdida de producción en las quintas

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Como consecuencia de las últimas heladas, se perdió un importante porcentaje de la producción del cordón frutihortícola local. Eso ya tiene su correlato en los precios que se observan en las verdulerías en las que el kilo de tomate o zapallito se vende entre 7 y 8 mil pesos. El encarecimiento llega también a otras frutas y verduras, algo que presiona a la inflación en el rubro de los alimentos.

Salvador Vides, productor local, evaluó que el impacto de las heladas pudo alcanzar el 50 por ciento en alguno de los productos de su establecimiento.

“Algunos tal vez resultaron más dañados porque las heladas los afectaron más; en mi caso hubo complicaciones con las acelgas y las cebolla de verdeo. A medida que levanten las temperaturas y no vengan fríos muy fuertes, se va a dar una leve recuperación”, sostuvo Vides.

En la zona de su establecimiento también se registraron algunas plantaciones de alcauciles quemadas por el frío, aunque no se dañarán las que no estén aún fructificadas.

“Ahora no es temporada de fruta acá, pero en un tiempo tal vez haya menos tomate, menos morrón, incluso de los que vienen del litoral, de Salta y Jujuy y pudo quemarlos las heladas”, apuntó el quintero.

Otros productores remarcaron que los distintos productos llevan su proceso por el impacto del frío.

“En un tiempo, cuando aumente la temperatura, todo lo que es hoja verde se va a ir acomodando, entre otros, la espinaca y el brócoli”, señaló Héctor Pestrín, titular de un puesto de frutas y verduras en el Mercado Regional local.

Pestrín opinó que hay productos que por estar fuera de estación siempre resultan más caros, aunque indicó que la espinaca y el brócoli tienen valores lógicos para ser invierno.

“La lechuga está complicada vamos a tener que esperar temperaturas más tranquilas, seguramente en 30 o 40 días se va a ir acomodando todo”, explicó.

En esa línea, Pestrín destacó que el mayor problema se da con el tomate y el morrón de cosecha temprana. También hay inconvenientes con el choclo, la berenjena, los zapallitos. “Los valores están complicados, no va a ser como otros inviernos con precios más estables, vamos a tener altos y bajos, sobre todo con lo que está fuera de estación”, agregó.

tomate a 70.000 pesos el cajón

Como referencia de la escalada de precios, el productor informó que, por ejemplo, un cajón con unos 14 kilos de tomate chileno cuesta 70 mil pesos, por eso llega a venderse entre 6 y 8 mil pesos.

El cajón con unos 12 kilos de zapallitos cuesta 60 mil pesos y en promedio se vende a 7 mil pesos el kilo.

En una recorrida realizada por EL DIA se encontraron tomates a menor valor, unos 3 mil pesos el kilo, pero de tamaño chico.

El frío afectó la producción local de tomate y el chileno se vende entre 7 mil y 8 mil pesos

“Vamos a tener variables, artículos con precios altos, pero cuando los números son excesivos, la gente lo deja de consumir, lo saca del menú, suplanta un artículo por otro. Mercadería hay pero va a haber faltante de algunas cosas puntuales”, concluyó Pestrín.

Los verduleros coincidieron en que los últimos aumentos en los precios de varios productos se debieron a los efectos dañinos del frío polar en la producción. Incluso se prevé que haya verduras que continúen aumentando en lo que resta del invierno.

la lechuga, a 7 mil pesos

Entre los artículos más caros se citó el kilo de lechuga, ronda entre los 7 mil y 8 mil pesos; el repollo blanco está 4 mil pesos el kilo.

Además se produjeron importantes subas en el zapallito, el zucchini y el tomate, en algunos comercios rondan los 7 mil pesos el kilo.

Desde la Federación de Trabajadores de la Economía Social (FETRAES) revelaron que la ola de frío provocó pérdidas de hasta el 70 por ciento de la producción en el cordón frutihortícola de La Plata, Berazategui y Florencio Varela.

Como ya se consignó eso está directamente relacionado al faltante de distintas frutas y verduras y en el consecuente aumento de precios.

En una economía de tanto ajuste, muchos consumidores cambiaron radicalmente sus hábitos y las compras ya no se hacen por kilo, sino por unidades. En estos días no es extraño ver cómo se compran dos cebollas, una zanahoria, tres papas y un puerro y el costo ronda los 4 mil pesos. Atrás quedaron los tiempos en los que se llenaba el changuito de frutas y verduras.

Se prevé que cuando mejoren las temperaturas bajará el precio de algunas frutas y verduras

El ajuste en los valores de esos alimentos, ya se empieza a reflejar en las mediciones de inflación.

En la tercera semana de julio, el indicador de la consultora LCG estimó que la variación de precios alcanzó un 0,6 por ciento en alimentos y bebidas, que se explicó en primer lugar por la suba del rubro Verduras (4,6 por ciento), seguido por Aceites (3,2 por ciento) y Productos lácteos y huevos (1,8 por ciento).

 

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