El Gobierno defiende la cotización del dólar, mientras sectores encienden las alertas

El propio presidente Javier Milei salió a responder a quienes hablan de un atraso cambiario

El reciente pago de parte de la deuda que el Gobierno nacional realizó motivó elogios de parte de algunos economistas, mientras algunos sectores mantienen dudas respecto del valor actual de la divisa. Al punto que el propio presidente Javier Milei salió a negar un atraso cambiario.

La experta en finanzas Elena Alonso calificó como "muy buena señal" el pago por más de 4.300 millones de dólares que el Gobierno realizó ayer por vencimiento de la deuda y dijo que "esto genera certezas" y
permitirá "mejorar las condiciones" a futuro. "Muchos lo veían como algo inviable el hecho de que se pagara pero el Gobierno ha demostrado que se puede y creo que es el camino que hay que seguir". "Se ha pagado más de 4.300 millones de dólares por el vencimiento de los bonos, legislación argentina y legislación Nueva York y eso ha hecho que bajen las reservasen más de 1.700 millones de dólares, pero si bien se han afectado las reservas brutas, en el corto plazo seguramente se va a ir recuperando", apuntó la economista.

"Seguramente a partir de este pago el riesgo país siga profundizando su baja y los precios de los títulos sigan subiendo, entendiendo que una vez que pagan cupones de amortización de los títulos y van devolviendo intereses los precios después de ese día van a estar más bajos", indicó, y señaló que ahora el desafío "está en levantar el cepo cambiario y para eso la cantidad de dólares que necesitaría el Banco Central sería más de 10 mil millones de dólares".

El economista Aldo Abram subrayó que la obligación se "terminó pagando con recursos propios, comprados con el superávit fiscal, lo cual yo creo que es una muestra potente de solvencia fiscal que le está
dando a argentinos y extranjeros, a los inversores y a analistas". "En otras ocasiones, lo que hizo el gobierno anterior, por ejemplo, y algunos de los anteriores, fue saquear las reservas, no comprarlas, poniéndoles a cambio letras intransferibles que no valían nada", advirtió.

Pero atención que también hay algunas voces que alertan sobre la cotización del dólar, algo que también impacta en la balanza comercial ya que con una divisa "planchada" acrecienta la tentación de las importaciones, sumado a alguna medida oficial en ese sentido. Tiempo atrás, desde la cámara que nuclea a los industriales PyMES alertaron sobre el posible cierre de miles de pequeñas y medianas empresas, y la consecuente pérdida de puestos de trabajo, si se profundizan los beneficios para la importación de productos terminados mientras que a nivel local se mantiene la presión impositiva.

"El efecto de la quita del Impuesto País y del cepo cambiario, sin una estrategia de producción nacional, sería más dañino que la recesión del primer semestre, que dejó a casi 46.000 trabajadores que pertenecían a la industria manufacturera, según el último informe del Observatorio de Industriales PyMES Argentinos (IPA)", señaló su titular, Daniel Rosato, que alertó sobre la posibilidad del cierre de 25.000 firmas y la pérdida de 300.000 empleos en 2025.

Rosato señaló que "hay tres factores que son positivos y deseados por la economía, pero que si no van acompañadas por una estrategia para alentar a la producción nacional podrían ser muy perjudiciales". En ese sentido, el industrial identificó que la baja de barreras para la importación, la eliminación del impuesto PAIS (que ya se efectivizó) y la quita del cepo cambiario terminarán alentando las importaciones y la primera consecuencia que tendría es un "mayor desempleo", porque "serán miles de trabajadores que las PyMES dejarán en la calle si se produce esta apertura".

"Hay que tomar los recaudos. Por eso insistimos en la necesidad de abrir el diálogo con el Gobierno, porque se tratan de sectores necesarios para sostener empleo y evitar más pobreza en el Conurbano bonaerense. Todos queremos que se termine el cepo cambiario, pero que los dólares se utilicen para pagar importaciones de productos terminados servirá para subsidiar el empleo en otros países", aseguró.

El campo no es ajeno a este escenario y algunas voces, como la del el ex titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, ya alertaron sobre el complejo panorama que vive el sector. En ese sentido, con la soja por debajo de los 300 dólares, el aumento de los costos, un verano sin lluvia, la caída del precio internacional, el retraso cambiario y el actual esquema de las retenciones "estamos frente a una tormenta perfecta" que, a su entender, "va a llevar al quebranto de las PyMES agropecuarias".

En el Gobierno hay convencimiento que no existe atraso cambiario y hasta el propio presidente Javier Milei sale a responder a quienes así lo expresan. “Me parece una vergüenza la declaración de (Domingo) Cavallo. Y me sorprende para mal su juicio tan ligero y tan mal fundamentado técnicamente. Porque cuando él era ministro y le hablaban del tipo de cambio se ponía violento”, afirmó el mandatario respecto de la sugerencia que el tipo de cambio necesitaba una corrección de 20%.

Milei sostuvo que “el equivalente al tipo de cambio que defendía en el Tequila era de $700 pesos sin equilibrio fiscal. Por lo tanto, me parece desafortunada e incorrecta en términos técnicos”.

El jefe de Estado defendió su posición al sostener que “los ‘econochantas’ hacen el corte para sus análisis en el año 2002, cuando hubo un overshooting altísimo (momento en el que el tipo de cambio estuvo en más alto en la historia argentina). La contracara fue la caída de la economía”. Añadió que en esta forma de analizar la situación “están mirando una situación de extrema desconfianza, y la muestra está sesgada. El tipo de cambio de la convertibilidad sería de $750. Todo depende de cuándo corto la serie. Lo están haciendo en un momento en que no se parece al actual”.

Milei aseguró que “es mentira que la Argentina está más caro que el resto del mundo” y repitió que “si devaluar fuera el método, Argentina debiera ser potencia”. “Los que piden devaluación quieren destruir el salario de los argentinos y mantener una renta estratosférica”, remarcó.

En ese marco, existen algunos datos que son celebrados por el oficialismo, como el que arrojó la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) de Trabajo, según la cual para los empleadores del sector privado entre diciembre de 2024 y febrero de 2025 prevén un incremento en la toma de personal del 3,9%, mientras que el 1,3% anticipa una reducción. O como que la cantidad de empleados privados registrados se consolidó entre agosto y noviembre últimos, según el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA). Y la idea es que incluso habrá una expansión aún mayor.

Dólar

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE