A una embarazada le apuntaron en la panza y en la cabeza en un robo

Edición Impresa

La falta de escrúpulos, o de “códigos” -como se mencionaba en otras épocas- está actualmente en el ADN de muchos delincuentes que no se andan con miramientos ni siquiera ante quienes saben que no podrán ofrecerles resistencia.

Sucede mayormente ante personas de avanzada edad, pero, como ocurrió ahora en la mañana de ayer en calle 29 entre 65 y 66, inclusive frente a una mujer embarazada.

De acuerdo a lo informado por una calificada fuente policial de esa jurisdicción, minutos después de las 11 de la mañana del sábado, una joven que se encuentra en el quinto mes de embarazo, cuya edad no trascendió, salió de su casa para hacer unas compras en el supermercado chino de 65 entre 28 y 29.

Al rato, con las mercaderías que adquirió en ese comercio, caminaba por calle 29 en dirección a su vivienda, alrededor de las 11.30, cuando vio detenerse en esa arteria a un Ford Focus gris.

Si bien inicialmente esa circunstancia no le llamó mucho la atención, quedó perpleja cuando observó que de ese auto descendieron un sujeto que estaba del lado del conductor y otro que estaba en el asiento trasero, portando sendas armas de fuego.

“DAME TODO, DAME TODO”

El vocero policial reveló que, en esos terribles momentos para la víctima, el miedo recorrió todo su cuerpo cuando uno de los delincuentes le apoyó el arma en la panza y su cómplice la encañonó en la cabeza.

La escena, por ilógica que parezca, sucedió a plena luz del día y a la vista de cualquiera. Con un nivel de impunidad que asombra e indigna al mismo tiempo.

“Dame todo, dame todo”, fue la orden que le impartieron a la indefensa mujer. Enseguida le arrebataron la cartera, donde guardaba “una billetera con 2.300 pesos, un celular Motorola E14 y estudios médicos”, citó el informante. Huyeron en el Ford Focus gris.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE