“Los vendieron”, la cruda advertencia a jubilados

Un matrimonio de jubilados de Olmos tuvo en la noche del viernes una pesadilla, pero no vivida durante un sueño, sino en tiempo real y por culpa de la imparable inseguridad que impera en La Plata desde hace largo tiempo.

De acuerdo a lo que pudo saber este diario de fuentes calificadas, a eso de las diez de la noche de esa jornada, un hombre de 72 años dormía junto a su esposa, de 71, en la casa que habitan en 44 entre 194 y 195, cuando fueron despertados por dos delincuentes que “entraron por la ventana de la habitación” de las víctimas.

Los voceros aseguraron que los intrusos fueron preparados para consumar el atraco sin encender las luces, para no despertar sospechas de vecinos.

Por eso, citaron los informantes, “se metieron en la casa de esta pareja de jubilados con linternas para alumbrar como las que usan los mineros, sobre sus cabezas”.

Esa fue la primera imagen que vieron los damnificados al abrir los ojos y encontrarse con esos ladrones en medio de la oscuridad.

“EL HOMBRE SE DESCOMPENSÓ”

Encandilado por esas diminutas lámparas, el dueño de casa enseguida escuchó de boca de quien comandaba las acciones una frase que lo estremeció: “Quedate quieto, que a ustedes los vendieron”, según reveló a este diario uno de los allegados a la investigación.

La segunda advertencia no se demoró en ser lanzada y, esta vez, para ambos. El vocero precisó que “les ordenaron que se quedaran recostados en la cama y bien tapados, para que no los miraran”.

Asimismo, hizo saber que “mientras el más tranquilo de los dos delincuentes se quedó vigilando al matrimonio, el más nervioso se dedicó a recorrer toda la casa para buscar el supuesto monto importante de dinero que decían tener como dato”.

La fuerte tensión provocada por la estresante situación, hizo mella principalmente en el mayor de esta pareja.

“El hombre se descompensó, cuando ya habían transcurrido varios minutos de la presencia allí de estos sujetos. Entonces, el asaltante que los cuidaba le permitió ir al baño y hasta le alcanzó un vaso con agua”, reveló después.

Sin embargo, el malestar para el jubilado determinó que, finalmente, “terminara vomitando” y que cuando escaparon los forajidos “la esposa alertó de lo ocurrido a un vecino y lo trasladaron al Hospital Italiano, donde le dieron suero y permaneció hasta las 6 de la mañana” de ayer, cuando pudo recuperarse.

“EN DOS MINUTOS NOS VAMOS”

Sobre el botín con el que huyeron ambos ladrones, el portavoz reveló que “les sustrajeron alrededor de 200.000 pesos, las alianzas y alhajas”. Y citó: “Escucharon que uno de los delincuentes se comunicó con un cómplice externo que les marcó que en dos minutos debían irse. Y así lo hicieron”.