Los Martínez de Ensenada, atravesados por el dolor

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En la calle 127 entre 34 y 35 de Villa Catella, Ensenada, el dolor abruma. A la reciente muerte de Axel Geremías Martínez (31) a manos de un conductor desaprensivo, que lo embistió con una camioneta y los dejó tirados cuando caminaba junto a dos amigos por Melchor Romero, uno de los cuales también perdió la vida. Pero además padecen por otras pérdidas muy caras a sus sentimientos. Todo en un lapso de casi dos meses. Nada. Carolina Martínez (45), la mayor de cinco hermanos, enfrentó la situación y contó: “Estamos destrozados. El 26 de abril se accidentó mi hermano Nelson de 46 años. Fue en 35 y 125, donde falleció. El 4 de mayo murió mi mamá, que estaba enferma, pero a la que esa noticia la terminó de derribar. Después lo de Geremías, también en un choque o como lo quieren llamar y este viernes mi otra hermana de 27 años”.

Sobre este último caso, se supo que ocurrió el 29 de agosto pasado y que se inició una causa caratulada como “averiguación causales de muerte”, con intervención del fiscal Martín Almirón, de la UFI Nº 8 de La Plata, que busca determinar las circunstancias del deceso.

Respecto de Geremías, se sabe del reclamo por la encarcelación del sospechoso del embiste trágico, aunque por ahora se maneja en las sombras de la impunidad.

Por eso hubo una nueva manifestación pública en esta últimas horas, en reclame de que se activen los operativos para dar con su paradero.

Los Martínez y los allegados a Franco Giampieri, la otra víctima del atropello, entienden que “debe hablar por teléfono con alguien cercano, debe estar escondido en alguna parte y tiene que tener plata para moverse”.

En ese contexto sospechan que debería haber rastros para ubicarlo, aunque el tiempo pasa y las sospechas crecen.

Como se sabe, la defensa del acusado planteó una coartada con la declaración de la supuesta persona que lo acompañaba el día del evento trágico y quien sindicó, con nombre y apellido, a otro conductor. Sin embargo, para el fiscal de la causa, Fernando Padovan, nada cambió en cuanto a su convicción de lo ocurrido.

 

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