Admitió estar cansado y asumen interinamente Bochini y Clausen

Enzo Trossero renunció ayer a la conducción técnica de Independiente por la "emergencia" de la crisis futbolística que atraviesa el club, informó el presidente de la institución, Roberto Galano.
El entrenador, quien tenía contrato con el club hasta diciembre del año próximo, había llegado a principios de temporada con expectativas de ganar el título, pero la pobre campaña lo marginó al noveno puesto, con 23 puntos, cuando restan tres fechas para el final del Apertura.
De esta manera, el equipo será dirigido por la dupla Néstor Clausen-Ricardo Bochini hasta esa instancia y, de acuerdo a los resultados, podría mantenerse en la conducción para el año próximo.
"Vamos a ver como se dan las cosas de aquí hasta fin de año. Si salen bien, yo no tendría problemas para que sigan porque son dos hombres del club y además la situación económica del club no es la mejor", precisó el titular de la institución, Roberto Galano.
Caso contrario, el nombre de Sergio Batista, actual director técnico de Argentinos Juniors, ya comenzó a circular como una alternativa posible.
El dirigente aseguró que "Trossero decidió renunciar" después de una reunión que mantuvo con la Comisión Directiva, porque "prefirió facilitar la gestión del club en esta emergencia futbolística".
"Es una pena, porque yo de Trossero realmente no tengo nada que decir. Creo que la campaña no fue la esperada por diversas circunstancias, entre ellas la falta de suerte", consideró Galano.
El dirigente confirmó que el entrenador "cobrará hasta su último día de trabajo" y reveló que la deuda que el club mantiene con él "no es de gran magnitud".
Por último, el presidente de Independiente negó que la salida del director técnico tenga alguna vinculación con las supuestas presiones que genera el presente exitoso de Racing Club, líder del torneo y cerca de convertirse en campeón después de 35 años.
"No tiene nada que ver, no es para tanto. Independiente en estos últimos años fue excluyente a nivel resultados", afirmó el dirigente del club de Avellaneda, cuyo último título local fue en 1994 bajo la conducción de Miguel Brindisi.