Más revelaciones sobre la matanza de Omaha

OMAHA, Nebraska.- El joven que mató a ocho personas en un centro comercial de Nebraska y luego se suicidó al parecer llevaba el fusil escondido debajo de la ropa, dijo la policía. El joven, Robert A. Hawkins, de 19 años, "al parecer llevaba algo escondido debajo de su suéter encapuchado", dijo el director la policía de Omaha Thomas Warren, citando imágenes de las cámaras de vigilancia durante los sucesos del miércoles.

Entre las víctimas había seis empleados de comercios y dos clientes, dijo la policía. Tres eran hombres y el resto mujeres. Horas antes, la propietaria de la vivienda donde vivía Hawkins dijo que él había llamado poco antes del suceso para anunciarle que pensaba quitarse la vida y matar a gente.

Hawkins había llamado a la mujer, Debora Maruca-Kovac, para agradecerle por toda su ayuda y decirle que la quería mucho, y para avisarle que había dejado una nota de suicidio, reveló Maruca-Kovac. Ella, sin embargo, dijo que no creyó que iba a hacerle daño a nadie más.

Hawkins mató a ocho personas con un fusil en el centro comercial Westroads Mall, que estaba atestado de gente debido a la temporada navideña. Era un joven atribulado: su novia lo había dejado y había sido despedido de su empleo. Tenía prontuario policial y había abandonado o había sido expulsado de la casa de sus padres. Las víctimas fueron escogidas al azar.

Fue el más trágico tiroteo en ese estado desde enero de 1958, cuando un individuo mató a 10 personas en Nebraska y una más en Wyoming. El centro comercial permanecía cerrado al público mientras las autoridades siguen investigando el incidente.

También ayer se supo que durante cerca de 30 minutos, Jodi Longmeyer le contó a un telefonista del servicio de emergencia 911 lo que veía el tiroteo de un adolescente en un centro comercial de Nebraska, recordó el viernes la mujer. Mientras le contaba al telefonista que podía ver al cuerpo de Robert A. Hawkins tendido cerca de un arma, su voz comenzó a entrecortarse, y empezó a llorar, una mezcla de tristeza y alivio de que el tenebroso episodio había terminado. Nueve personas, entre ellas el atacante, murieron. "Había visto más de lo que quería", expresó Longmeyer al canal de televisión NBC, describiendo la llamada al 911. El centro comercial estaba repleto de gente.

Las autoridades estatales dijeron que Hawkins pasó cuatro años en centros de tratamiento especial, y en casas de cuidado temporal para personas con problemas de drogadicción, de comportamiento o mentales, después que amenazó con matar a su madrastra en el 2002.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE