Aaron Beilinson
| 24 de Noviembre de 2009 | 00:00

Su fallecimiento
A los 89 años falleció el destacado ingeniero Aaron Beilinson, partida que enlutó amplios círculos de esta ciudad que lo apreciaron tanto por sus valores humanos como por su probada idoneidad profesional.
Nació el 3 de noviembre de 1920 en Bakú, Rusia, sus padres fueron Sara Guinsburg y Benjamín Beilinson quienes también tuvieron a su hermano Emanuel. A los 4 años llegó a la Argentina junto a su familia y fue tan grande el apego por esta tierra que cuando creció no dudó en nacionalizarse. Pasó sus primeros años en Bahía Blanca y al cumplir 18 dejó esa ciudad para inscribirse en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata de donde egresó como ingeniero civil.
Junto a Mauricio Bubis y Aniceto Artabe fundó en abril de 1945 la compañía constructora Babic S.A, empresa en la que llegó a ser presidente. Con esa firma participó de grandes obras públicas como la construcción de más de 1.500 km de caminos en la Argentina y los proyectos hidroeléctricos Futaleufú, Arroyito, Los Reyunos, El Tigre y Yaciretá.
Además se asoció con otras empresas platenses como Hidrovial y Codi S.A y fue parte de varias comisiones tanto a nivel nacional como provincial de la Cámara Argentina de la Construcción, entidad en la que también fue consejero.
En 1948 se casó con Berta Zbar, juntos consolidaron una familia que creció con la llegada de sus hijos Daniel, Guillermo y Eduardo "Skay" -ex guitarrista del grupo Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota- que a su vez lo hicieron abuelo de 7 nietos y 3 bisnietos.
Fue un melómano que no dudó en viajar a distintos lugares del mundo para asistir a funciones de ópera y de música clásica. Esa pasión también lo llevó a ser uno de los impulsores de la Fundación Teatro Colón.
En su tiempo libre le gustaba navegar y para desarrollar esta actividad se asoció al Yacht Club Argentino.
Hasta el año 1973 vivió en La Plata, luego se mudó a Capital Federal y en los últimos años dedicó su vida al arte, en particular a la realización de esculturas, muchas de las cuales le valieron importantes distinciones nacionales.
Sus allegados lo definieron como una persona cálida, simpática y amigable, algunas de las razones que lo llevaron a ser apreciado y respetado dentro y fuera del ambiente de la construcción.
A los 89 años falleció el destacado ingeniero Aaron Beilinson, partida que enlutó amplios círculos de esta ciudad que lo apreciaron tanto por sus valores humanos como por su probada idoneidad profesional.
Nació el 3 de noviembre de 1920 en Bakú, Rusia, sus padres fueron Sara Guinsburg y Benjamín Beilinson quienes también tuvieron a su hermano Emanuel. A los 4 años llegó a la Argentina junto a su familia y fue tan grande el apego por esta tierra que cuando creció no dudó en nacionalizarse. Pasó sus primeros años en Bahía Blanca y al cumplir 18 dejó esa ciudad para inscribirse en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata de donde egresó como ingeniero civil.
Junto a Mauricio Bubis y Aniceto Artabe fundó en abril de 1945 la compañía constructora Babic S.A, empresa en la que llegó a ser presidente. Con esa firma participó de grandes obras públicas como la construcción de más de 1.500 km de caminos en la Argentina y los proyectos hidroeléctricos Futaleufú, Arroyito, Los Reyunos, El Tigre y Yaciretá.
Además se asoció con otras empresas platenses como Hidrovial y Codi S.A y fue parte de varias comisiones tanto a nivel nacional como provincial de la Cámara Argentina de la Construcción, entidad en la que también fue consejero.
En 1948 se casó con Berta Zbar, juntos consolidaron una familia que creció con la llegada de sus hijos Daniel, Guillermo y Eduardo "Skay" -ex guitarrista del grupo Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota- que a su vez lo hicieron abuelo de 7 nietos y 3 bisnietos.
Fue un melómano que no dudó en viajar a distintos lugares del mundo para asistir a funciones de ópera y de música clásica. Esa pasión también lo llevó a ser uno de los impulsores de la Fundación Teatro Colón.
En su tiempo libre le gustaba navegar y para desarrollar esta actividad se asoció al Yacht Club Argentino.
Hasta el año 1973 vivió en La Plata, luego se mudó a Capital Federal y en los últimos años dedicó su vida al arte, en particular a la realización de esculturas, muchas de las cuales le valieron importantes distinciones nacionales.
Sus allegados lo definieron como una persona cálida, simpática y amigable, algunas de las razones que lo llevaron a ser apreciado y respetado dentro y fuera del ambiente de la construcción.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE