Una estudiante platense murió en el fatal aluvión de lodo en Perú

La platense Lucía Ramallo Sarlo, de 24 años, es una de las víctimas fatales del aluvión de lodo y piedras que la sorprendió mientras dormía en su carpa, y la sepultó hasta provocarle la muerte. La joven realizaba la excursión conocida como "El Camino del Inca", en Perú, con destino final a la ciudadela de Machu Pichu. Había partido desde nuestra ciudad hace dos semanas a localidad de Cuzco con un grupo de amigos, y habían contratado un tour de cuatro días.

Ya habían recorrido casi la totalidad del Camino del Inca. Y se encontraban descansando en el campamento llamado Wiñay Wayna cuando a las dos y media de la madrugada del lunes, hora peruana, fueron sorprendidos por una ola de tierra y barro, que enterró parte del camping donde se encontraba la joven y sus amigos, quienes resultaron seriamente heridos.

Víctor Hugo Pérez, director de Turismo de la ciudad de Cuzco, informó ayer que el cadáver de la joven estaba siendo evacuado a Cuzco en el último helicóptero, por lo que el funcionario calculó que el cuerpo de la joven platense arribaría hoy a esa ciudad.

Además, Pérez sostuvo que la repatriación del cuerpo se haría cuanto antes, "en cuanto termine el trámite oficial, que en general demora un día". Según pudo recabar este diario, está previsto que un avión de Aerolíneas Argentinas traiga el cadáver de regreso.

Autoridades diplomáticas confirmaron que además de la muerte de Lucía, dentro de los heridos del campamento hay tres jóvenes argentinos heridos: Matías Daniel Marino, Andrés Di Gregori y Luz Romina Campos; siendo el caso de esta última el más preocupante.

ESTUDIANTE DE DISEÑO

Lucía estudiaba la carrera de Diseño e Indumentaria en la UBA, vivía con sus padres y con una hermana en la calle 5 entre Güemes y Pellegrini, en City Bell, y ni bien trascendió la noticia de su fallecimiento, se vivieron en ese barrio del norte platense escenas de hondo dramatismo. (Ver aparte).

Hija del prestigioso odontólogo Manuel Ramallo Zenteno, dueño de una clínica ubicada en 7 entre 34 y 35 de nuestra ciudad, y de Sandra Ramallo, arquitecta, Lucía se dedicaba además del estudio, a vender bolsos ecológicos a través de internet.

Según relataron familiares y vecinos a este diario, Lucía estaba acostumbrada a realizar viajes como "mochilera", y no era la primera vez que iba a Machu Pichu. "Era una chica muy madura, y muy independiente", contó una de sus vecinas.

Por otra parte, autoridades diplomáticas informaron además que habría unos 700 turistas argentinos varados a causa del alud, y que demorará al menos dos días el rescate de los mismos (ver Pág.16).

En tanto, el embajador argentino en Perú, Darío Alessandro, declaró que "la mayoría de los turistas están en la localidad de Aguas Calientes", y que desde allí la única forma de sacarlos "es a través de un puente aéreo", porque todos los caminos están cortados por las inundaciones.

"Nos comunicamos vía celular con varios turistas y están bien, pero nosotros no tenemos la solución para sacarlos porque el operativo de rescate depende del estado peruano", explicó Alessandro.

El operativo de rescate se inició ayer, a las 7, con helicópteros del ministerio de Defensa peruano que trasladaron en viajes sucesivos hacia Cuzco a los visitantes, unos 3.000 en total.

EL ALUD

El domingo, medio millar de argentinos quedó varado en proximidades de Machu Pichu como consecuencia de un alud de barro que cortó las comunicaciones ferroviarias, único medio para acceder a la zona, y además desbordó los ríos.

Machu Pichu es una construcción piramidal incaica, construida en el siglo XV, y es considerada una obra maestra de la arquitectura y de la ingeniería. Es asiduamente visitada por argentinos, aunque su ubicación selvática, al sur del Perú, lo hace accesible sólo por tren.