Todo un ejemplo de tenacidad

El secreto de Oscar Cid de La Paz es remar en el sentido contrario a las agujas del reloj... El remero platense posee la fórmula para "detener el tiempo" momentáneamente y así seguir en competencia a nivel local e internacional. Es que con sus 81 años, Oscar es uno de los deportistas veteranos más longevos del país, que siguen en actividad. Recientemente Cid de La Paz, retornó de México, donde participó de la XXVº edición de la regata internacional del club España, del Distrito Federal. Esta vez la competencia sirvió para festejar el centenario del club remero del país Azteca. Hoy se entrena con la mente puesta en el próximo mundial, que se realizará en Polonia en el mes de septiembre.

Las regatas se realizaron en un espejo de agua próximo al DF mexicano. En la laguna de Xochimilco se encuentra el club organizado a más de 2 mil metros sobre el nivel del mar. "Estuvimos en un club bárbaro, nos recibieron de maravillas. Nos bancaron el alojamiento, la comida, los traslados al aeropuerto. Así que lo poco que llevamos lo aprovechamos para hacer alguna excursión. El torneo se hizo en la misma cancha olímpica de los Juegos de 1968. Así que todo fue espectacular, no había ninguna queja de los deportistas. Todo muy bien", contó Oscar.

El platense que corrió esta vez para el club Náutico Nahuel del Tigre, fue tercero en el single, manga que ganó el argentino Atilio Frasson de 70 años y entre ellos el norteamericano Lev Sklyanskiy. Luego en el doble par junto a Fresson, se adueñaron del primer puesto pese a dar varios años de handicap ante sus rivales. "Lo que me di cuenta en este torneo, que ya no estoy para bajar de categoría. En el Sudamericano de la Argentina también bajé de categoría y ya no me puedo hacer el loco, porque a mi edad ya se nota y mucho bajar. Acá sabía que era así y no hice un papelón. Mi compañero es categoría H y yo soy J y entre los dos armamos un I. Porque el promedio de edad de ambos nos dio 75 años".

Más allá del torneo en si, los encuentros entre tantas camadas de remeros genera un clima especial entre ellos. "La camaradería fue fantástica. Había botes de diecisiete países, fue una experiencia muy linda y donde los mexicanos ganaron la mayoría de las regatas", agregó Cid de La Paz.

Los años pasan y Oscar rema y rema en la cancha de su club, Regatas La Plata. "En esto del remo se puede seguir hasta que uno se pueda subir al bote. Hace un tiempo que tengo un problema en el cuello, que para un lado no lo puedo girar del todo y por eso acá en la Argentina, a mi bote le puse un espejo de moto. No para correr, pero si para la entrada en calor o remar en esa zona mixta que siempre está repleto de remeros y así no pegarle a otro bote".

Si bien gran parte de su vida la pasó dentro del club, sus vivencias del presente están muy lejos de lo poco que pretende como remero. "Del club no puedo renegar. Soy socio desde los 15 años. Toda mi carrera la hice en el Regatas La Plata. Fui suplente del equipo Panamericano de 1951, conformé varias comisiones directivas, fui cinco veces presidente del club. Al remo y al club los llevo bien adentro. Pero jóvenes de hoy no se qué es lo que buscan. Vienen, ponen sus condiciones, hacen sus cosas y después desaparecen y no se los ve nunca más. El remo master hay que dejarlo, no molesta", señaló el platense molesto por no contar con las respuestas deseadas dentro de la institución.