Recuerdan a Epecuén a 30 años de la inundación
| 11 de Noviembre de 2015 | 02:50

La inundación de la villa turística de Epecuén cumplió ayer 30 años y los vecinos de la zona realizaron distintas actividades para recordar a aquel poblado de 1.500 personas, ubicado a siete kilómetros de la ciudad bonaerense de Carhué, que quedó bajo el agua tras la crecida de la laguna, en medio de un temporal de lluvia que rompió un terraplén de contención.
La ciudad estuvo 20 años cubierta por las aguas saladas, pero desde hace diez, las sequías facilitaron el retroceso del lago y hace tres que el casco de la ciudad apareció transitable, por lo que el sábado volverá a iluminarse de manera excepcional.
Desde hace una década, la villa se convirtió en un nuevo atractivo turístico para la zona, que fue estudiado por antropólogos y sociólogos por la forma en que sus pobladores tuvieron que afrontar la catástrofe, incluso con juicios contra el estado provincial y en los que recuperaron no más de la mitad del precio de sus casas.
El descenso de las aguas dejó a la vista los restos de las viviendas, comercios e instituciones de Epecuén que cambiaron la fisonomía del lugar por el daño que causó la salinidad de las aguas, comparadas con las del Mar Muerto.
Ayer, en el acceso a la villa autoridades comunales y vecinos descubrieron placas identificatorias en lo que era la Avenida de Mayo, calle principal del balneario.
“Epecuén no volvió a tener luz después del 10 de noviembre de 1985, y la idea es que se pueda volver a tenerla una noche y que la gente lo viva con nostalgia y recuerdos”, señaló el director de Turismo de la municipalidad de Adolfo Alsina, Javier Andrés.
La noche del 10 de noviembre de 1985 un temporal rompió el terraplén que protegía la villa y el agua comenzó a subir a un centímetro por hora, y en dos semanas los 1.500 habitantes tuvieron que dejar la villa en una penosa mudanza.
Epecuén, fundado en 1921, fue famoso por las condiciones terapéuticas de sus aguas saladas y recibía miles de turistas por temporada.
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