Un economista y ex ministro, respaldado por Vargas Llosa

El economista y ex ministro peruano Pedro Pablo Kuczynski puede convertirse con 77 años en el presidente de mayor edad electo democráticamente de la historia de Perú si logra ganar las elecciones en su segundo intento por alcanzar la Presidencia. Bajo la marca de Peruanos Por el Kambio (PPK), su propio movimiento político, Kuczynski se quedó a las puertas de pasar a la segunda vuelta en los comicios de 2011, donde terminó por apoyar a Keiko Fujimori, a la que ahora es casi seguro que se enfrentará en segunda rueda. Para esta elección recibió el apoyo del Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, quien deseó que pueda obtener el apoyo suficiente para imponerse a Fujimori. Casado en segundas nupcias con la estadounidense Nancy Ann Lange, Kuczynski prometió agua potable a 10 millones de peruanos, tarea que empezó con su ONG Agua Limpia, fundada hace cinco años y, entre sus propuestas, también está impulsar la economía peruana con una baja de impuestos para pymes e inversores.

PROMESAS DE CRECIMIENTO

Formado en economía en Oxford (Inglaterra) y Princeton (EE UU), Kuczynski se presenta como un experto en las recetas neoliberales que puso las bases para el crecimiento sostenido que la economía peruana tuvo en los últimos años. Pero sus detractores le recuerdan que cuando era gerente del Banco Central fue acusado por el gobierno militar de Juan Velasco Alvarado de hacer un pago irregular a la filial de la International Petroleum Company (IPC), empresa que había sido estatizada. Kuczynski se refugió en EE UU para no ser detenido y no volvió a Perú hasta 1980, cuando el presidente Fernando Belaúnde Terry lo nombró ministro de Energía y Minas, su especialidad. Como ministro promulgó la llamada ley Kuczynski, que fomentaba la explotación de petróleo y de gas, pero se derogó por las críticas a las exenciones tributarias que permitía a empresas extranjeras. Kuczynski volvió a emigrar de Perú en 1982 por las amenazas del grupo terrorista Sendero Luminoso, pero Alejandro Toledo lo recuperó para su gobierno tras ganar en 2001 y lo nombró primero ministro de Economía y Finanzas y luego primer ministro. Fuera de la política, Kuczynski es un eximio flautista.