Tres mujeres a merced de dos ladrones durante tres horas

A lo largo de más de tres horas, una vecina de La Loma estuvo a merced de una pareja de delincuentes que le robó lo que quiso. Primero, entraron en la vivienda de su suegra. Pero como no les bastó lo que había ahí, la llevaron a su casa para continuar con lo suyo. Y para transportar el botín, usaron de “remís” el auto de una vecina, en la cuadra del segundo asalto.

Todo empezó en 44 y 137, con dos amigas yendo a la vivienda de una de ellas, aproximadamente a la 1 de la mañana de ayer. Las víctimas andaban en auto y frenaron por el semáforo en rojo, sin sospechar que esa circunstancia provocaría lo demás

A su lado, se acercaron los ladrones en una moto de baja cilindrada. “Las encañonaron y las hicieron ir a la casa de mi mamá”, explicó Cristian, el marido de una de ellas, en diálogo con este medio.

De esa forma, ellas se dirigieron obligadas hasta un domicilio de 33 y 146, en San Carlos, donde amenazaron a la dueña y le robaron dinero en efectivo, de acuerdo al relato del hombre.

Aunque ya habían conseguido lo que querían, la codicia de la pareja delincuente no tenía límite: además de asaltar ahí, hicieron lo mismo en el domicilio de una de ellas, en La Loma.

La segunda parte de esta secuencia se pareció a una entradera en la que, como es habitual, las víctimas fueron interrogadas sobre dónde había elementos de valor y efectivo.

“Había poca plata así que se dedicaron a robar todo lo que es vendible: una tablet, un televisor, ropa, y algunos electrodomésticos”, explicó Cristian, a quien además le quitaron una moto.

El episodio destiló tensión constantemente, aunque la salvedad fue que “por suerte no les pegaron”, de acuerdo al relato del hombre.

con un “remis” apropiado

A esa altura, los asaltantes ya habían colectado varias pertenencias pero no tenían cómo trasladarlas. Así que “se llevaron el auto de una vecina y lo usaron de remís”, comparó el marido de una de las damnificadas.

De esa forma lograron transportar todo el botín hasta un sector bien distante de la Región. Aparentemente, la pareja manejó hacia Villa Montoro, hasta un domicilio que estaría sobre calle 5, en donde descargaron lo sustraído.

Llamativamente, la pareja regresó a 35 entre 22 y 23 y dejó el auto ajeno donde estaba, tal vez para no dejar rastros con la búsqueda que se implementaría luego para tratar de ubicarlo.

Mientras, los minutos parecían no transcurrir más. En total, el asalto se extendió por más de tres horas, porque ya eran más de las 4 de la madrugada cuando finalmente todo terminó.

Durante el calvario, a las amigas las dejaron encerradas en un baño, junto con la tía de una de ellas. Pasó un rato hasta que pudieron pedir auxilio y la Policía fue a intervenir.

A pesar de los operativos que se montaron en la zona y alrededores, no hubo manera de que los agentes pudieran ubicar a la pareja asaltante.

En procura de ubicarlos, se están analizando las cámaras de seguridad de los distintos lugares por los que los ladrones se movieron, sin apuros y con total impunidad, al igual que en las tres horas que duró todo.