Peñarol se vistió de Papá Noel y se regaló el ansiado regreso a Primera A

Por LEANDRO DUBA
lduba@eldia.com

Peñarol Infantil, de Lisandro Olmos, sigue disfrutando de la mieles del éxito. Del ascenso que acaba de concretar a la máxima categoría de la Liga Amateur Platense, después de un segundo intento.

Jugadores, cuerpo técnico, dirigentes e hinchas viven sus horas más emotivas, después de aquel categórico 3-0 sobre La Plata FC., en el partido de la promoción, que lo depositó en primera división luego de una temporada.

Sí, Peñarol había descendido a finales del 2016, y en apenas un puñado de meses, regresó a la elite del fútbol amateur con sangre joven y el espíritu renovado.

“El proyecto de trabajo que encabezó Fabián Testa era a largo plazo. Pero a medida que el equipo fue encontrando su verdadero nivel, acompañado de resultados, se prendió en una pelea ardua que termino con el ascenso. Y dentro de ese proyecto, se apostó a que los chicos tengan ese sentido de pertenencia. Gracias al esfuerzo del grupo, el objetivo de volver a primera se hizo realidad”, expresó a este diario, el presidente de la institución, Pablo Santillán.

Iván Serpe, ayudante de campo, fue otro de los que se refirió a este ascenso muy festejado por la familia del “aurinegro”. “La clave de todo fue haber conformado un excelente grupo de trabajo. Y un plantel unido, donde mezcló la juventud y la experiencia”.

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A pocas horas de celebrarse las Fiestas de Navidad y Año Nuevo, el mejor regalo que pudo recibir Peñarol fue precisamente el retorno a primera división, después de una temporada cargada de exigencias.

Y en ese afán de prolongar con los festejos, parte del plantel y el cuerpo técnico visitó la redacción de este diario para contar las sensaciones tras el logro deportivo. Ezequiel Cazzulo, con 40 años, es el jugador más experimentado del grupo. Con varias batallas por sus espaldas, el delantero aseguró que “creo que este fue el mejor torneo de todos, por lo que significó ascender con Peñarol. Habíamos descendido el año pasado, y el objetivo fue justamente el regreso, sin importar lo que había que poner en juego”.

Para Valentín Rubare, “este es mi primer ascenso con Peñarol. Nos fuimos a la B, con lo que eso significa, le pusimos el pecho a las balas, y acá estamos, nuevamente disfrutando este ascenso que vale un montón para todos nosotros”.

Jonathan Lescano dijo lo suyo: “Estábamos convencidos de que íbamos a ascender. Por todo lo bueno que hizo el equipo”.

Para Lucas Verón, por su parte, “queríamos ascender no sólo por nosotros, sino por toda la gente, que nos acompaña siempre”.

Juan Santillán es otro de los que opinó sobre el ascenso. “Pusimos a Peñarol en el lugar que jamás debió dejar”.

Diego Bruno tuvo la suerte de formar parte de los dos ascensos en la historia del club: en 2010 y ahora. “Regresé a Peñarol este año con un solo objetivo: retornar a primera. Se hizo posible gracias al trabajo de todos. Y a la unidad del grupo, que fue fundamental”.

Ezequiel Quiroz, que también vive sus horas más emotivas en lo deportivo, aseguró que “el año pasado se sufrió mucho, por el descenso, pero ahora, la historia se revirtió. El fútbol volvió a darnos otra revancha”. Y Matías Pagnussat destacó “la unidad del plantel”.