Para Pinedo, la credibilidad de la Corte quedó herida "no desde lo jurídico"

Para el presidente provisional del Senado "hubo buena fe" de parte de los jueces que votaron a favor del controvertido fallo

El presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, afirmó hoy que la credibilidad de la Corte Suprema de Justicia “evidentemente” quedó herida tras el fallo que habilitó el 2x1 a un represor, pero consideró que no “desde lo jurídico” ya que “hubo buena fe” de parte de los jueces que votaron a favor de la medida.

"Yo no hubiera votado a favor del 2x1. Me parece más grave en un represor que en un delincuente común”, dijo Pinedo en declaraciones a la prensa, pero destacó no obstante que “es un valor trascendente la independencia de los jueces, por más que no estemos de acuerdo con la decisión de un juez”.

“Si (una decisión) fue tomada de buena fe, lo que corresponde es respetar la opinión diversa", indicó Pinedo, para quien “definitivamente hubo buena fe” de parte de los magistrados Elena Highton de Nolasco, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz que votaron a favor de la sentencia.

De esta manera, Pinedo se diferenció de la integrante de la línea fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Nora Cortiñas, quien pidió hoy la renuncia de esos tres jueces de la Corte Suprema así como la del secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, luego del masivo repudio al fallo del tribunal expresado ayer en todo el país.

En tanto, al ser consultado sobre si quedó herida la credibilidad de la Corte tras el fallo, el presidente provisional del Senado contestó: “desde el punto de vista político tal vez sí, evidentemente sí, pero desde lo jurídico no, porque había antecedentes".

En cuanto a la marcha de ayer en Plaza de Mayo convocada por los organismos de derechos humanos, Pinedo indicó que “fue impresionante que tanta gente se comprometa en un tema tan relevante para la Argentina y se puso en jaque con la resolución de la Corte” y precisó que no participó de la marcha porque estuvo trabajando en el Congreso “hasta tarde”.

En ese marco, defendió la postura del gobierno ante el fallo del máximo Tribunal y destacó sobre todo el accionar del Congreso, que trabajó “con velocidad y seriedad” el tema hasta aprobar ayer la ley que prohíbe la aplicación de la ley del 2x1 a los condenados por delitos de genocidio, lesa humanidad y crímenes de guerra.

Por último, afirmó que esta ley “se podría haber sancionado en el 2001 o en otro momento anterior” y que eso “hubiera clarificado a los jueces” y recordó que hubo casos, como en el 2013, cuando el máximo tribunal “resolvió el 2x1 y, en ese momento, (Eugenio) Zaffaroni dijo que había que tomarlo para beneficiar a un represor”.

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