Ordenan detener a un policía antinarco acusado de vender drogas en La Plata

Testigos y filmaciones lo ubican en un operativo que se hizo en 2016, pero no figuraba en el acta

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Más de un año después de que se encontrara una fuerte cantidad de droga en un micro escolar que tenía previsto salir de La Plata hacia la Time Warp de Capital Federal donde murieron cinco personas, en las últimas horas ordenaron la detención de un policía de la Dirección Unidad Especial de Lucha contra el Narcotráfico sospechado de haber llevado esas sustancias.

Aquel operativo se hizo el 15 de abril de 2016 en 6 y 51, donde policías de la Superintendencia de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado secuestraron 182 pastillas de éxtasis, dosis de LSD, cigarrillos de marihuana y cocaína, y apresaron a los dos supuestos dealers, Exequiel Alicio y Luis Fabrizzi, quienes desde entonces permanecen detenidos en un penal de Florencio Varela.

Desde un primer momento circuló la versión de que en aquel procedimiento habían demorado también a un policía de Narcotráfico conocido como “Paul”, y oficialmente identificado como Paul Andreatta, al que testigos aseguran haber visto descartarse “pastillas” y llegar (antes del registro) en un Mini Cooper gris “que no fue revisado”.

Sin embargo, en el acta de procedimiento no aparecía mencionado el nombre de este efectivo que en sus ratos libres disfruta de pasar música en fiestas privadas y electrónicas. O disfrutaba.

Es que el juez Fernando Mateos ordenó ahora su detención por el delito de “comercialización de estupefacientes calificado por ser su autor personal policial encargado de la prevención o persecución de los delitos previstos en la ley 23.737 (de drogas” y dispuso que allanaran su domicilio, en busca de sustancias, material de corte y “elementos electrónicos de almacenamiento de información”. Hasta ahora no lograron capturarlo. Fuentes judiciales informaron que tiene pedido de captura nacional y la prohibición “para salir del país por tierra, aire y agua”. Trascendió que Andreatta tenía una eximición de prisión vigente, que Mateos dejó sin efecto.

cambio de fiscal

Inicialmente la causa por el hallazgo de la droga quedó bajo la instrucción del fiscal Fernando Cartasegna, hasta mayo pasado, cuando se retiró con licencia tras los ataques que sufrió dentro y fuera de su despacho (ver página 24). Entonces se hizo cargo de este expediente el fiscal Alejandro Marchet, que después de analizar las actuaciones y a instancias del ayudante fiscal de drogas Juan Pablo Iacarino pidió al juez Mateos que avance sobre Andreatta.

En la orden de detención del policía, a la que este diario tuvo acceso, el magistrado cuestionó en duros términos la primera intervención fiscal: “No puedo pasar por alto la profunda extrañeza que me causa la circunstancia de que el material cargoso previamente ponderado ya se encontraba reunido desde un buen tiempo atrás a esta parte, no obstante lo cual ninguna petición como la presente se ensayó hasta este momento”.

El juez tuvo en cuenta el relato de un testigo de identidad reservada, quien declaró que al llegar “a la esquina (6 y 51) lo vi a Paul Andreatta ahí parado, cuando subo al micro le dijo a Yésica (una amiga) que ese chico es policía ide Narcotráfico, que era raro que esté ahí (...) antes de que suba la policía (al micro) una chica que estaba ahí con nosotros dijo que le había comprado las pastillas a Paul. Cuando yo le comento esto al policía (...) me responde que ‘ya lo tenía esposado al traidor ése (...)’ En esa que estoy hablando veo que Paul se va en su auto y le digo ‘me dijiste que lo tenías esposado’ y el policía me contesta que se estaba yendo con un policía, pero no vi ningún policía ni lo vi esposado a este Paul en ningún momento”.

Otro testimonio importante es el de una chica que sitúa al oficial de Narcotráfico “sobre la calle 6” al momento de la irrupción de los otros efectivos y cuenta que lo vio descartarse “una cajita de metal con pastillas adentro”. Agrega: “Sé que siempre anda con cien pastillas, sabíamos que había vendido cinco o seis, por eso digo que tenía 94 pastillas cuando las tira”.

Más adelante relata que “en eso la policía lo golpea (a ‘Paul’), queda tumbado en el piso y lo esposan (...) escucho que la policía le decía que era un vigilante de mierda y por qué se metía en todo esto (…) y veo que lo suben a su auto, y suben dos policías con él y se van”.

En la causa se incorporó un video que muestra la “previa” del operativo, dejando ver al Mini Cooper del policía a metros del colectivo y a él al lado de uno de los imputados y su novia, confirmaron fuentes oficiales.

“Se lo ve en el video, lo mencionan los testigos, fue quien arrojó al piso las pastillas que tenía en su poder y fue esposado por la policía, quien inmediatamente lo reconoció como ‘colega’ e incluso lo reprendió”, aseguraron los defensores Alfredo Gascón y Miguel Angel Molina en el hábeas corpus que presentaron para pedir la nulidad del procedimiento y la libertad de su cliente, Exequiel Alicio.

También pidieron la filmación de las cámaras de la zona y de todas las que pudieron haber registrado el paso del Mini Cooper con los policías, pero -otro dato curioso- “ninguna filmó nada”, dijeron desde la defensa.

 

 

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