Amenazaron a tres hermanitos y mataron a cuatro perros en Abasto

El más chico supuso que era un juego. A los otros los ataron y hasta amagaron con darles cintazos

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Cuatro delincuentes armados sometieron a tres hermanitos durante un robo en Abasto, dos nenes y una nena. El par de mellizos, los mayores, fueron amenazados con armas y maniatados. Inclusive al varón le pegaron un cachetazo. El momento más tenso fue cuando la banda amenazó con secuestrar al más chiquito. “Me quisieron llevar y les dije que no”, lanzó él, con una sonrisa que dejó en claro que no entendía de lo que se hablaba.

La secuencia se vivió en una casa de productores de verduras de Abasto, ayer a la madrugada. El matrimonio salió de su casa de 204 y 518 a la hora de siempre, rumbo a un mercado de Lanús.

Posiblemente, los cuatro ladrones lo sabían y se lanzaron con decisión a entrar en esa propiedad. Saltaron el paredón frontal y uno de ellos, el más flaco y escurridizo, se metió por una pequeña ventana. El les permitió la entrada a los demás.

En la mitad de la madrugada, los tres niños fueron despertados, amenazados con pistolas -cada uno tenía un arma- e interrogados acerca de dónde sus padres guardaban plata.

Por supuesto, los nenes no tenían ni idea de dónde podía haber dinero. “Nosotros nos manejamos con depósitos en el banco. Así que para encontrar lo poco que se llevaron, revolvieron toda la casa”, explicó René Quispe, padre de las víctimas.

Antes de todo eso, los ladrones le dieron carne envenenada a los cuatro perros mestizos que controlaban el patio. Fueron cayendo muertos de a uno.

Enloquecidos en la búsqueda de más efectivo, “amenazaron con llevarse secuestrado al nene más chico, de cinco años”, dijo René. Los mellizos más grandes, de 10, fueron atados con bufandas y cordones de zapatillas. También amagaron con pegarles cinturonazos. Ellos estaban aterrados, pero el menor pensó que se trataba de un juego.

La banda se dedicó a saquear la casa. Un televisor, celulares y electrodomésticos formaron parte del botín. Se estima que permanecieron ahí alrededor de una hora. Los ladrones cargaron todo en la VW Amarok nueva de la familia, en la que se escaparon y que anoche no había sido encontrada.

A las 7 de la mañana, René y su mujer volvieron para toparse con la novedad desagradable: “Lamentablemente, la gente laburante está en la mira. Nunca me habían robado acá y hasta ayer creía que este era un lugar tranquilo”, expresó.

Otro episodio con rasgos parecidos se dio ayer a las 10 de la mañana en 45 entre 215 y 216 de Olmos. Ahí, tres delincuentes llegaron en una camioneta Ford F100 y se dedicaron a robar varios electrodomésticos. Un testigo avisó al 911 de la maniobra y la policía llegó cuando el grupo aún estaba ahí. Se inició entonces una persecución en la que los ladrones se alejaron en el vehículo, que terminaron abandonando en 52 y 206. De ahí fugaron a pie.

 

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